Málaga registra en 2022 más muertes que en los años previos a la pandemia

La mortalidad ha crecido en la provincia de Málaga respecto a los años previos a la pandemia. Es la principal conclusión que arrojan los datos provisionales del Instituto Nacional de Estadística (INE) de 2022. Pero hay más. Entre otras, que los fallecimientos por o con Covid son los más bajos desde que estalló la crisis del coronavirus y que las enfermedades circulatorias y los tumores siguen ocupando el primer y segundo lugar, respectivamente, como causas de muerte.

Por último, otra cifra sobre la que psicólogos vienen alertando desde hace muchos años: los fallecidos por suicidio superan con creces a los de accidentes de tráfico.

En 2022, el total de muertes registradas en la provincia según el INE fue de 15.172. Son algo menos de las 15.370 de 2021. Pero el número de decesos del año pasado supera al de años previos a la pandemia. En 2018, el INE contabilizó 14.025 y en 2019 un total de 13.445. Es decir que en 2022 hubo 1.147 y 1.727 óbitos más que en esos dos años, respectivamente. Incluso, dado que en 2020 los fallecimientos ascendieron a 14.690, en 2022 se registraron 482 más que en el primer año del Covid.

No hay estudios científicos que expliquen las razones de este incremento, aunque diversos especialistas lo atribuyen a las causas directas o indirectas de la pandemia. El Sistema de Monitorización de la Mortalidad Diaria (MoMo), dependiente del Ministerio de Sanidad, refleja que del 1 de enero de 2020 al 31 de diciembre de 2022, en la provincia de Málaga se registraron 3.001 muertos más de los previstos por este programa de vigilancia epidemiológica.

“La primera causa que se me ocurre para explicar este aumento es que todavía son las consecuencias sobrevenidas del Covid”, apunta el geriatra José Antonio López Trigo. Recuerda que además de los fallecidos por Covid, hay otras personas “a las que no mató el coronavirus”, pero que murieron tras la descompensación que el virus produjo en sus patologías de base, como una insuficiencia cardiaca, respiratoria o renal.

López Trigo cree que ese incremento de decesos pueden ser también consecuencia de otras enfermedades que se dejaron de diagnosticar debido al colapso del sistema sanitario que ocasionó el coronavirus. “Hay que recordar que se retrasaron mucho los procesos diagnósticos”, comenta. En unos casos, por el parón que sufrió la sanidad y en otros, por el temor de los propios pacientes a acudir a un centro sanitario por temor a contraer el virus. Es decir, que aquel atasco asistencial todavía se está cobrando vidas de personas que enfermaron de Covid u otras patologías.

La explicación es una hipótesis, pero las cifras son realidad: hay más muertes anuales que antes de la pandemia. La buena noticia es que bajan los fallecimientos con o por Covid. Hubo 1.058 en 2020, 1.467 en 2021 –el peor año– y 848 en 2022. Es decir, que de los tres años de pandemia, el ejercicio pasado –cuando ya la vacuna hacía sus efectos– es el que deja menos fallecidos.

Para explicar el incremento de muertes totales, también hay que tener en cuenta que desde marzo de 2020, el coronavirus es una causa más de fallecimiento. Antes este patógeno no existía. Desde entonces hasta finales de 2022, un total de 3.373 personas han muerto infectadas con Covid.

Hay sanitarios que también apuntan que habría que tener en cuenta para explicar el incremento de decesos que la población ha aumentado y no sólo la empadronada, sino también la de hecho.

Los datos del INE confirman además que la primera causa de muerte en Málaga –en la misma línea que en el resto de España– son las enfermedades del sistema circulatorio. En 2022, causaron 4.394 fallecidos.

La segunda causa de decesos, igual que en años anteriores y que en el resto del país, son los tumores. Y tal como advierten los oncólogos, los casos de cáncer crecen de forma sostenida. En la provincia se registraron 3.497 en 2019, 3.546 en 2020, 3.670 en 2021 y 3.803 en 2022.

Los avances de la Medicina dejan buenos datos en las estadísticas de mortalidad. Así, el año pasado sólo hubo un fallecido por meningitis. Hay que tener en cuenta que ya la vacunación contra esta patología lleva muchos años y que progresivamente se ha ampliado a distintas variantes (ACWY y B). También las muertes por embarazo, parto o puerperio son excepcionales: solo hay una en los últimos cinco años.