El ejemplar juvenil de delfín listado (Stenella coeruleoalba) que este martes fue rescatado en la playa de La Misericordia murió horas después en las instalaciones del Centro de Recuperación de Especies Marinas Amenazas (CREMA) del Aula del Mar, donde permanecía ingresado. Y ello, según han informado desde fuentes de estas instalaciones, "pese a los cuidados intensivos de los profesionales". "Su estado de salud era muy delicado, con un estado físico pobre y presencia de parásitos externos", han detallado. 

El animal había sido encontrado varado. Estaba enfermo, débil y muy delgado, pero aún con vida. Su pronóstico no era favorable, dado que los expertos habían observado que podía llevar sufriendo una enfermedad desde hace un tiempo y así lo constataba el estado de extrema debilidad y delgadez que presentaba. 

"Es tristemente común que los delfines que acaban varados vivos mueran pese a los cuidados de los centros de rescate, ya que en el 90% de los casos los animales llegan tan enfermos que ya es demasiado tarde para sacarlos adelante", han lamentado desde el Aula del Mar. La previsión es que esta mañana se le realice la necropsia para poder esclarecer los motivos de su muerte.

El de este caso se trataba de una especie típica de la bahía de Málaga y, en general, de toda la zona del Mediterráneo. Normalmente vive lejos de la orilla y evita acercarse. Es completamente inofensivo para el ser humano. “Cuando estos delfines aparecen varados en la playa suelen tener los ojos del cerrado por el miedo”, explicó tras su hallazgo en la playa el responsable del Aula del Mar. De ahí que subraye la importancia de que las personas se mantengan alejadas del animal, sin aglomeraciones, y evitando ruidos intensos “porque se estresan mucho y pueden llegar a sufrir un infarto”.