Publicista busca anunciante

Con la crisis, los espacios vacíos de las vallas publicitarias cada vez se notan más, sobre todo las ubicadas en la autovía, ya que por sus grandes dimensiones no pasan desapercibidas. "Anúnciese aquí" y "Disponible" se convierten así en los mayores reclamos de los empresarios en busca de alguna entidad que quiera anunciarse, pero la cosa no está nada fácil. "Las crisis está afectando a todos los sectores y obviamente también al de la publicidad", comenta Javier Medina, publicista y propietario de numerosas vallas que si no fuera por el número de contacto, estarían totalmente en blanco. Este problema se ve más agravado aún cuando "los propios montadores de las vallas han desaparecido porque la mayoría de ellos está en paro", explica Medina. "Nosotros ya nos hemos adaptado a esta situación. Ahora sólo queda esperar tiempos mejores", añade.

Quien no comparte este optimismo es José Becerra, publicista de la empresa Tecnoseñal, cuya sede se encuentra en Marbella, aunque sus anuncios se expanden por diferentes municipios de la Costa del Sol, como Benalmádena y Fuengirola. "El 90% de la zona ha caído. Apenas quedan empresas que puedan permitirse un anuncio", dice. Con respecto al sector que más ha bajado, sin duda alguna éste ha sido el de las promotoras. "Si la construcción está parada, no se pueden vender casas y por tanto, las promotoras tampoco se pueden anunciar", comenta, no sin antes añadir que "en Marbella llevan un año sin poder vender un apartamento". Por otro lado, "las promotoras que quizás sean capaces de vender no pueden hacerlo porque los bancos no conceden créditos". De hecho, el precio de una valla publicitaria varía en función de si es de alquiler o compra. En este último caso, puede rondar los 2.000 euros, según el marbellí, que explica que ni las ofertas ni las rebajas han ayudado a superar el bache. "Los únicos anunciantes vienen de algunas comunidades, pero poco más". Según Becerra, la crisis sólo ha sido la guinda del pastel: "La actividad empezó a bajar ya en 2006, pero ahora está más complicada". Cara al futuro, el veterano en este sector se muestra muy escéptico: "No me atrevo a dar un pronóstico porque no veo probabilidad de que esto vaya a cambiar a largo plazo".

El empresario Manuel Pérez, de Fijaciones y Montajes Andalucía, afirma que se está manteniendo a flote gracias a que muchas de sus vallas publicitarias se encuentran ubicadas en "sitios buenos". Aún así, indica que "los alquileres están fatal", así como que a menudo se ha visto obligado a rebajar las tarifas considerablemente. "Si antes un alquiler era de 250 euros al mes, ahora con suerte lo alquilo por 150 euros", dice. Para él la caída de las promotoras y las empresas del sector inmobiliario también ha sido muy notable. "Antes vendías cualquier cartel publicitario por 2.500 euros porque el dinero era fácil de amortizar, ¿pero ahora?", se pregunta. No obstante, siguen habiendo entidades que no han dejado de anunciarse. "Hay productos que siempre hacen falta", dice el joven. "Tengo un cliente en Rincón de la Victoria que lleva dos años anunciando gafas y de momento, va a seguir con las tres vallas que tiene a su disposición". En cuanto a otro tipo de empresas que reclaman estos espacios publicitarios, Pérez señala que "suelen ser centros comerciales, empresas de grandes superficies, especialmente cadenas de supermercados. Es raro ver que una entidad más pequeña se anuncie".

¿Y cómo se sobrevive en el mundo de la publicidad en los tiempos que corren? Pérez lo tiene claro: "Sobrevivo gracias a encargos más pequeños, en papel, como pósters y carteles". Un ejemplo de cómo, en plena crisis, se puede seguir en el gremio. Aunque sea a menor escala.

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