El verano se despide esta semana -el viernes 23 entra el otoño- con temperaturas aún elevadas, con máximas entre 25 y 29 grados, y más sol que nubes en la provincia de Málaga. Sin embargo, este próximo miércoles se prevén lluvias débiles en el litoral y tormentas en la Serranía de Ronda. 

Según la información publicada por la Agencia Estatal de Meteorología, hoy lunes se esperan cielos poco nubosos, salvo intervalos nubosos por la mañana en el litoral, además de nubes bajas y brumas o nieblas matinales en el extremo occidental. Se producirá nubosidad de evolución diurna en el interior, como explican desde la Aemet, y temperaturas sin cambios. Los vientos serán flojos y variables. 

Este martes la situación no va a diferir demasiado. El mapa predictivo muestra cielos poco nubosos, con intervalos de nubes altas por la tarde, y nubosidad de evolución diurna en el interior. No se descarta algún chubasco ocasionalmente acompañado de tormentas.

En cuanto a las temperaturas, las máximas oscilarán entre los 25 grados de Marbella y los 29 de Antequera y Ronda. En Málaga capital refrescará un poco y los termómetros no subirán de los 27 grados. Las mínimas seguirán en 20 grados, aunque bajarán a los 17 en el interior de la provincia. 

En las primeras horas del día del miércoles, habrá intervalos nubosos en todo el litoral malagueño con chubascos débiles. En los pueblos de la Serranía de Ronda, la lluvia podría venir acompañada de tormentas, que se irán disipando a medida que avance el día. Por la tarde, se alejan las probabilidades de precipitaciones, que ya no se verán en el mapa de la provincia hasta el jueves en la comarca de Antequera y el sábado. Las máximas oscilarán entre los 26 y los 28 grados y las mínimas entre 16 y 20 grados. 

No obstante, si la evolución del tiempo continúa según las predicciones de la Aemet, la lluvia será escasa y no solucionará el acuciante problema de reserva hídrica que tienen algunas zonas de la provincia, principalmente la Axarquía. Habrá que seguir mirando al cielo.