Roca acusa a Gil de idear la trama Pinillo para ayudar a un amigo

El cerebro del caso Malaya, Juan Antonio Roca, aseguró ayer al tribunal encargado de juzgar la operación urbanística en la finca El Pinillo de Marbella que fue el fallecido alcalde, Jesús Gil, quien ideó la operación para ayudar a un amigo. En esta causa se investiga la operación urbanística sobre la finca El Pinillo, que comenzó con la expropiación a sus dueños, y pasó a ser urbanizable.

Anticorrupción acusa al exalcalde de Marbella Julián Muñoz, Roca, exediles del Grupo Independiente Liberal (GIL), funcionarios municipales y a empresarios por una operación urbanística, con la que se permitió la enajenación de patrimonio municipal, presuntamente, en su beneficio.

Roca, que fue asesor de urbanismo y de la sociedad Planeamiento 2000, indicó en el juicio que "la compra de la finca fue para hacerle un favor" al propietario, que era amigo de Gil. Asimismo, señaló que este amigo fue a buscar a Gil para pedirle ayuda, ya que el banco le iba a quitar la finca por una deuda, y que aunque en un principio dudó, quiso ayudarle. Insistió en que no hubo intención de expropiar, sino que fue "una farsa", ya que se le dio ese título, pero fue una compraventa de mutuo acuerdo, donde Gil puso dinero, ya que el Ayuntamiento no tenía.

Roca explicó que Muñoz no tuvo nada que ver en dicha operación, porque era Gil el que tomaba las decisiones. Roca se enfrenta a una petición fiscal de 15 años de cárcel y para Muñoz se piden 11 años.