Los remolcadores Lamnalco Merlin y Lamnalco Macaw que con destino al desguace entraban de urgencia al puerto de Málaga en marzo del pasado año, finalmente, serán reparados en aguas malagueñas.
Después de permanecer inactivos desde su llegada y cambiar de atraque en varias ocasiones por requerimientos de tráfico interno, hace unos días, estos dos buques, amarrados desde hace meses en el muelle número cuatro, comenzaban una serie de preparativos antes de entrar en el dique flotante de Cernaval-Mario López.
Tras quedar habilitados todos sus accesos que estaban sellados y quitar las concertinas que los cubrían, un grupo de operarios iniciaban una serie de labores de limpieza; unos trabajos exteriores e interiores que se prolongarán hasta finales de este mes, momento en el que según previsiones, ambos remolcadores quedarán varados en el dique Andalucía.
Y si bien la intención inicial era que estos dos barcos fueran desguazados en Grecia, la segunda oportunidad que vivirán estos buques y que se iniciará en el puerto de Málaga se debe a un cambio de armador que se efectuó entre los meses de junio y julio.
Cumplimentada esta transacción en aguas malacitanas, el antiguo propietario de los remolcadores, la naviera Smit Lamnalco con sedes en Emiratos Árabes Unidos y Holanda, los vendía por medio millón de euros a la empresa francesa Seamed, una compañía implicada en diversas ramas del sector marítimo internacional.
Ante esta circunstancia y con el añadido de que ambos remolcadores, consignados desde su llegada al puerto por la agencia Pérez y Cía., ya tienen un trabajo asignado en Oriente Medio para finales de marzo, la reparación prevista, si no hay cambios de última hora, debería quedar finalizada en un tiempo no superior a un mes.
Construidos en los astilleros ABG Surat en la India en 2007, estos dos buques gemelos de 1.290 toneladas de registro bruto y 53 metros de eslora clasificados como barcos de apoyo para plataformas petrolíferas, tras pasar toda su vida activa en Nigeria, se han salvado de ser desmantelados gracias a una vía de agua que uno de ellos sufrió en su último trayecto mientras otro barco similar los remolcaba con destino a la localidad helena de Lakkion.
Un accidente que los posicionó de emergencia en el puerto de Málaga y que tras una serie de vicisitudes que se han sucedido durante cerca de un año finalmente les permitirán prolongar su biografía.
Más información sobre marítimas en El blog de Juan Carlos Cilveti: La mar de historias.
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