El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, ha respondido al consejero de Fomento y Vivienda, Felipe López, en relación con el proyecto del Metro, que lo que hay que hacer "es ir cumpliendo bien todo lo que se planteó en el protocolo de intenciones firmado en noviembre de 2013". "Es oportuno recordarlo", ha apostillado.

Preguntado acerca de las declaraciones de la semana pasada de López en el Pleno del Parlamento andaluz acerca de que las "dudas planteadas" por el alcalde sobre el proyecto del Metro, en alusión al trazado en superficie hacia el Hospital Civil, "no son oportunas", De la Torre ha afirmado que "no tengo nada que decir respecto a lo último que hemos hablado ya, que es el cumplimiento de ese protocolo".

Al insistirle sobre el hecho de que, según López, "los intereses de la ciudad no deben tomarse amparándose detrás de un colectivo, que siendo respetable, no es la mayoría", el regidor malagueño ha insistido en su "respuesta genérica".

"Hay un protocolo firmado, que tiene una serie de puntos, y todos en su globalidad deben contemplarse para ser cumplidos", ha dejado claro el alcalde 'popular'.

Acuerdo vecinal

Tras varias semanas sin pronunciarse sobre el polémico proyecto de prolongación en superficie de la línea 2 al Hospital Civil, el pasado día 5 De la Torre, durante una reunión con vecinos a la que fue invitado por la Plataforma No al Tranvía, dejó claro que "no concibo que se haga una obra de esta importancia sin que haya acuerdo vecinal".

De la Torre, respaldando así a los vecinos y comerciantes de Bailén-Miraflores que rechazan la prolongación del ferrocarril urbano hasta la zona norte de la ciudad, dijo entonces con contundencia que "no se puede incumplir lo firmado", en referencia a ese protocolo de intenciones de 2013, que "ha de cumplirse en su totalidad". Así se mostraba la pasada semana En un encuentro al que acudieron del orden de 80 residentes y comerciantes del entorno afectado por el trazado programado por la Consejería de Fomento:

Precisamente, incidió en que en el protocolo de intenciones firmado con la Junta en noviembre de 2013 se estableció como condición 'sine qua non', a propuesta del Ayuntamiento, "no hacer nada sin tener el acuerdo vecinal" porque "ya entonces veíamos indicios de que la obra en superficie podía producir problemas y rechazo entre los ciudadanos".