El alcalde de Málaga se niega a responder sobre la renuncia al Mundial: “Todo está dicho, el 24 resolveremos las dudas en el Pleno”

El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, ha rehusado este lunes de ofrecer nuevas explicaciones sobre la decisión de la ciudad de renunciar a que sea una de las sedes del Mundial de Fútbol 2030. Durante un acto en el Ayuntamiento con el Colegio de Administradores de Fincas, el regidor ha sido preguntado por los medios sobre distintos aspectos relacionados con la pérdida de la candidatura, sin que las demandas hayan tenido una constestación acorde.

Su respuesta, repetida en varias ocasiones, ha sido tajante: “No creo que tenga que añadir nada más del tema, todo quedó claro este sábado y me remito a las declaraciones que hice. Eso es en definitiva todo lo que puedo contestar. Cualquier cuestión que surja más se tratará en el Pleno que vamos a hacer el 24 de julio a las 11:00 y ahí resolveremos todas las dudas al respecto”.

Sólo ha precisado una cuestión: lo gastado hasta este momento, que ha cifrado en 500.000 euros en distintos estudios, apuntando que aún hay margen hasta los 705.000 euros que habían consignado las tres administraciones para los informes previos necesarios. Estos, ha indicado este lunes, al igual que dos días atrás, podrán ser utilizados para la futura decisión que se tome respecto al estadio.

De la Torre se aferra a la explicación que ofreció el pasado sábado, cuando compareció acompañado por representantes de la Junta y la Diputación, pero habló en solitario durante más de media hora. Fue entonces cuando anunció que, tras una reunión con las tres instituciones propietarias de La Rosaleda, el Málaga CF y un sector de la afición, se renunciaba formalmente a continuar con la carrera por ser sede del Mundial.

“Esto explotó cuando salió la noticia del aforo de 12.500 en el Ciudad de Málaga, cuando lo previsto eran unos 25.000 y la bajada creó inquietud”, justificó De la Torre en esa comparecencia. “Después de todo este encuentro, creemos que lo sensato es renunciar a la candidatura del Mundial 2030, porque supone un riesgo para el club y para la afición y no merece la pena continuar”.

Un fracaso para muchos

La renuncia ha sido leída como un fracaso colectivo por parte de las instituciones implicadas. La candidatura contaba con el beneplácito de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), el Comité Organizador y la FIFA, pero no ha sido capaz de cumplir los plazos ni ofrecer una solución técnica viable para la remodelación integral de La Rosaleda.

“No se trata de ahorrar dinero, sino de tomar una decisión responsable”, aseguró el alcalde en su alocución del sábado. “Esto lo compartimos las tres administraciones. El Mundial era un medio, no un fin en sí mismo. Queremos que haya un nuevo estadio, ya no para el Mundial, sino para el club y la ciudad”.

Aun así, este lunes ha vuelto a surgir la cuestión del gasto realizado. De la Torre ha recordado que se contaba con una partida de 705.000 euros para estudios técnicos y análisis previos, y ha recalcado que todo se ha hecho “con la verdad por delante”. “Hemos sido siempre sinceros, como se dijo este sábado, pero si es necesario ahondaremos en la cuestión en el pleno del 24”, ha reiterado el regidor.

Uno de los puntos más controvertidos ha sido la decisión de trasladar al Málaga CF al Estadio Ciudad de Málaga mientras se realizaban las obras. Lo que comenzó como una solución transitoria de 25.000 localidades acabó convertido en un aforo de 12.500, lo que generó rechazo entre la afición y, según De la Torre, aceleró la renuncia. “Hay que elegir entre el Mundial y el club, y elegimos al club”, dijo el sábado. “El Málaga necesita a su afición, y no podemos poner en riesgo su estabilidad deportiva ni económica. Pensamos que es muy necesario que el Málaga cuente con la afición, ese jugador número 12”.

El alcalde insistió también en que Málaga tiene limitaciones urbanísticas que han dificultado encontrar una alternativa viable dentro del calendario exigido por la FIFA. “¿No nota las diferencias entre el entorno de Málaga y el de otras ciudades? Dígame qué sitio tiene Málaga para poder hacerlo. La ciudad tiene unas condiciones fabulosas, pero también limitaciones. Entre esta y otra sin limitaciones, pero no tan maravillosa, pues elijo la de Málaga”, manifestó.

El pleno, nueva fecha clave

La oposición municipal ha calificado la renuncia como un “fiasco”, exigiendo explicaciones más detalladas y responsabilidades políticas. Para responder a ello, el alcalde ha convocado un pleno extraordinario el próximo 24 de julio a las 11:00 horas, donde se abordará todo lo relativo a la retirada de la candidatura, el dinero invertido y el futuro del estadio.

Allí se espera que se dé cuenta de los informes técnicos realizados, del estado del convenio firmado con la Junta y la Diputación, y de los posibles pasos a seguir para modernizar La Rosaleda o construir un nuevo estadio sin los condicionantes del Mundial. Hasta entonces, el alcalde opta por guardar silencio.