Málaga

El niño británico sigue en el Materno a la espera de que un juez decida sobre su futuro

  • Un juzgado británico tiene su tutela Los padres quieren llevarlo a tratar a Praga, pero la Consejería de Salud espera instrucciones de la Justicia del Reino Unido

Dos sistemas judiciales y la sanidad pública de dos países intentan garantizar que Ashya King -el niño británico de 5 años con un tumor cerebral sacado por sus padres de un hospital inglés sin consentimiento médico- reciba asistencia más allá de las creencias de sus progenitores, testigos de Jehová. Un juzgado de Portsmouth (Reino Unido) ha asumido la tutela del menor y -a la espera de que resuelva si se la devuelve o no a los padres y qué tratamiento oncológico se le da- el niño sigue ingresado en el hospital Materno, acompañado de su madre.

La consejera de Salud, María José Sánchez Rubio, indicó que la tutela la tiene un juzgado de esa ciudad británica y que por lo tanto la Administración andaluza "debe responder a quien tiene la tutela". De hecho, la Delegación de Salud recibió por la mañana una llamada del juez del condado de Portsmouth para informarle de esa situación del menor. Los padres, Brett y Naghmeh King, pudieron reencontrarse ayer con el pequeño tras salir de la cárcel madrileña de Soto del Real (Madrid) en donde permanecieron bajo detención judicial durante algo más de 24 horas por llevárselo sin autorización médica del Hospital General de Southampton (Reino Unido) hasta que la Fiscalía británica revocó la petición de arresto el martes por la tarde. Según la agencia Efe, Ashya se echó a llorar al ver a sus padres entrar ayer en su habitación del Materno.

Los progenitores y su abogado llegaron poco antes de las 15:00 al hospital malagueño, donde los esperaban casi un centenar de periodistas, el equipo médico y autoridades sanitarias. Lo primero que hicieron fue subir a ver al niño. Luego, la madre se quedó con el pequeño en la habitación y el padre, su letrado y la cónsul británica en Málaga mantuvieron una reunión de más de dos horas para hablar sobre la situación del menor. El hospital les facilitó un sitio para el encuentro, pero las autoridades sanitarias no participaron por tratarse de una reunión privada. Los progenitores buscan para su hijo un tratamiento oncológico menos agresivo que no lo deje "en estado vegetal". Al pequeño le extirparon el tumor, pero ahora debe seguir un tratamiento oncológico. Los padres sostienen que la radioterapia convencional es demasiado fuerte para él.

"En Inglaterra, los médicos nos dijeron que si no seguíamos el tratamiento, sacarían al niño de nuestra custodia y el Gobierno se haría con la responsabilidad", dijo ayer el padre en una rueda de prensa ofrecida por la mañana en Sevilla, antes de llegar a Málaga. Los padres insistieron: "La radioterapia no es la respuesta, es muy fuerte para el niño y no queríamos que quedara en estado vegetal. Por este motivo de amor nos marchamos [del hospital]", explicó Brett King. "Por eso vinimos a España. Para vender mi casa que está en Casares y pagar el tratamiento privado, ya que en Inglaterra nos dijeron que no iban a pagar el tratamiento", añadió.

La familia quiere que el menor sea tratado con haz de protones, una terapia que según profesionales consultados por Málaga Hoy "deja menos secuelas y no es ninguna locura que la pidan los padres, pero no se da ni en el Reino Unido ni en España". Hay un centro que aplica ese tratamiento en Praga (Chequia), que es a donde los padres quieren trasladar al pequeño.

Según dijo el abogado de la familia, Juan Isidro Fernández Díaz, cerca de las 20:00 tras permanecer unas cinco horas en el hospital, el menor obtendrá el alta en "menos de una semana" y será trasladado a Praga "en avión o ambulancia". La Delegación de Salud no confirmó estas afirmaciones del letrado.

Fernández Díaz también hizo hincapié en que los padres de Ashya "no han cometido ningún delito" y que "nunca han perdido la custodia" del menor. No obstante, según la agencia Efe, reconoció que "están solucionando alguna cuestión sobre la tutela". "Tienen la custodia porque nadie se las ha quitado", afirmó. De hecho, dijo que pueden llevarse al niño "cuando quieran", afirmación que tampoco confirmó ni desmintió la Delegación de Salud.

Según el letrado, sus progenitores se llevarán a Ashya "a la mayor brevedad posible para buscar el mejor tratamiento". Efe apunta la posibilidad de que el pequeño sea tratado en la República Checa o también en Francia. La Policía Nacional localizó al menor enfermo el pasado sábado en Benajarafe (Vélez-Málaga), gracias a la llamada al 091 que realizó una trabajadora del hostal La Esperanza donde se había alojado la familia. Hasta el lugar se trasladaron efectivos policiales, que arrestaron a los padres.

Los progenitores del pequeño pasaron el lunes a disposición del juzgado central en funciones de guardia de la Audiencia Nacional en cumplimiento de una Orden Europea de Detención y Entrega (OEDE) emitida por Reino Unido. El juez Ismael Moreno ordenó su detención judicial por un plazo máximo de 72 horas mientras recibía informes del hospital malagueño.

Tras recibir dicha documentación, citó a los padres para ayer miércoles, aunque antes la Fiscalía británica revocó la petición de arresto contra el matrimonio por llevarse a su hijo del centro médico, por lo que se archivó el procedimiento y los progenitores salieron de la cárcel de Soto del Real la noche del martes. Allí los esperaba un familiar que los trasladó hasta Sevilla, donde dieron la rueda de prensa, y luego, al Materno, donde se reencontraron con Ashya.

Brett King se quejó ayer al afirmar que "algo ha fallado en la Justicia" de su país porque han sido tratados "como criminales".

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios