La crisis de Félix Sáenz

Banco Popular, propietario del inmueble, sólo vende uno de los 44 cuya comercialización inició hace casi un año

Fachada principal del edificio Félix Sáénz.
Sebastián Sánchez Málaga

03 de marzo 2013 - 01:00

Durante más de 120 años acogió en sus entrañas los antiguos almacenes Félix Sáenz; en la última década, tras cambiar de manos en cuatro ocasiones, pasó a convertirse en una de las promociones residenciales señeras de la capital de la Costa del Sol, y, en la actualidad es uno más de los cientos de edificios tocados de lleno por la crisis económica. El emblemático inmueble, cuyos orígenes datan de 1888, representa a la perfección la dura realidad del sector del ladrillo, puesto que de los 49 pisos que se distribuyen en sus plantas superiores (las plantas baja y primera están ocupadas por una tienda de ropa), sólo hay vendidos, que no necesariamente ocupados, cinco.

Los datos son aún más llamativos si se tiene en cuenta que cuatro de estos espacios ya estaban enajenados antes de que la construcción fuese asumida por su actual propietario, el Banco Popular. La entidad financiera la recibió de la promotora Restaura, incapaz de asumir las obligaciones contraídas con el banco. La filial inmobiliaria de la financiera, Aliseda, inició la comercialización de las 44 viviendas que restaban en abril del año pasado, pero los resultados de la operación son escasamente alentadores.

En la página web de Aliseda se puede comprobar cómo en este momento, casi un año después, se oferta la venta de 43 pisos, uno menos que en el momento en que arrancó la comercialización. "La venta es mala, va muy despacio", admite el representante de Aliseda en la provincia de Málaga, que subraya la complejidad de dar salida a un producto residencial con precios elevados. "Conseguir un cliente para el nivel del edificio es complicado", dice.

La información disponible en la web marca una horquilla amplía de valores de compra. El más bajo, de 324.000 euros, se corresponde con un apartamento de 49 metros cuadrados. Es decir, 6.612 euros el metro cuadrado. El extremo más oneroso asciende a 840.948 euros, con una superficie de 126 metros cuadrados (6.674 euros el metro). Las cifras contrastan con las manejadas años antes, cuando se situaba el metro cuadrado en unos 9.000 euros.

Desde Aliseda se comenta que a pesar de la escasa venta, no se ha adoptado una política de bajada de precios generalizada. Sí habla de que de media se han ajustado a la baja entre un 5% y un 10%. "Es un producto difícil de comercializar", añaden. "El principal público objetivo es el cliente nacional y ese es muy difícil de obtener", apostillan. Las perspectivas de Aliseda cuando se inició el proceso de venta no apuntaban a una venta masiva de los pisos, pero "sí algunas unidades más, sobre todo de los mejores inmuebles, que son los que dan a la plaza y en los que la calidad precio es mejor".

El edificio de Félix Sáenz fue adquirido por Banco Popular a finales de 2011. Compró por alrededor de 33,5 millones de euros las plantas superiores, las destinadas al uso residencial. Más que una adquisición se trató de una asunción de la propiedad después de que la promotora Restaura decidiese entregar esta parte del inmueble como parte de su deuda con el citado banco. Las dos primeras plantas del inmueble, de uso comercial, fueron adquiridas por 24,5 millones por la firma Nergosa, que las arrendó a H&M para la instalación de una tienda de gran tamaño. Banco Popular protagoniza la última de las maniobras de cambio de manos. Esta cronología tiene su inicio en septiembre de 2004, cuando por aquel era dueña la firma Somersen, que se embolsó unos 21 millones de euros tras venderlo a un grupo empresarial local, promociones Tres Aceras. A mediados de 2007, Félix Sáenz volvió a cambiar de titular cuando Restaura pagó unos 30 millones a la firma malagueña.

No hay comentarios

Ver los Comentarios

También te puede interesar

Lo último