El derrumbamiento en el túnel del AVE de Abdalajís se produjo a medianoche durante un mantenimiento

El derrumbamiento debido a una filtración de agua en el túnel del AVE a la altura del Valle de Abdalajís se produjo a medianoche, cuando no circulaba ningún tren, y fue avistada durante una banda de mantenimiento de técnicos de Adif, según fuentes conocedoras. El desprendimiento mantiene cortado uno de los túneles, el de la vía 1, por lo que el conjunto de los ferrocarriles circulan al completo por el otro de los tubos. Esto está suponiendo demoras leves en la circulación, que continuarán hasta que se puedan solventar la incidencia.

Este periódico ha preguntado al Administrador de Infraestructuras por el plan de trabajos necesarios para poner solución al problema, además de una estimación temporal para ello, sin haber obtenido respuesta al cierre de esta edición. Esto afecta de igual manera a todos los trenes (AVE, AVLO, Iryo o Ouigo) entre Córdoba y Málaga, lo que conlleva retrasos entre la Costa del Sol y Madrid.

Cabe recordar que la construcción del túnel a la altura de esta localidad pinchó el acuífero, por lo que el suministro de agua a los vecinos lo sigue pagando Adif, en compensación, y se hace mediante camiones con cubas de agua. Esto sucedió en 2005, por lo que son 20 años los que lleva este problema sobre la mesa.

Adif informó a través de su cuenta de X de la incidencia. Asegurando que se debe a la "presión hidrostática del acuífero próximo a la infraestructura". Además, ha señalado que se ha localizado un "desprendimiento de cascotes que no comprometen la estructura y la seguridad del túnel". A preguntas de este periódico, Adif no precisó el alcance de las afecciones ni el plan de trabajo para repararlo. Simplemente afirmó un portavoz del Administrador de Infraestructuras que "se está trabajando para resolverlo lo antes posible". Y que "si fuese necesario cortar la circulación lo comunicaremos".

Distintos ingenieros consultados por este periódico explican que, si bien puede deberse –aunque sea en parte– a la falta de mantenimiento, seguramente tenga que ver con las últimas lluvias después de la sequía. "El acuífero funciona como una bolsa que ha debido estar vacía durante la sequía, en los muros de tierra, entonces, entra aire y se hacen más endebles. Al volver a llenarse, posiblemente superllenarse –es decir, hacerlo más que el nivel al que está en períodos normales– la presión sobre los muros –recordemos que reducidos– es mayor, por lo que puede ceder".

Algo así como lo que pasó en la carretera de Ronda cuando se desprendió parte del talud. "Aunque hubiese esperado que hubiese pasado más cerca de la temporada de lluvias", afirma una de las fuentes consultadas, aunque indica que la presión acumulada durante mucho tiempo puede ser una causa.