Un 30% de los drogadictos inician el consumo entre los 12 y 15 años

La droga está presente en todos los sitios y ningún grupo de edad escapa a ella, incluidos los menores. De hecho, los adolescentes son los más afectados por esta lacra como demuestra el hecho de que el 70% de los drogadictos que están siendo atendidos por Proyecto Hombre en Málaga iniciaron su consumo entre los 12 y 19 años. Un 30% comenzaron a tomar drogas entre los 12 y los 15 años y el 40% restante entre los 16 y los 19 años. Un 1,6% lo hace incluso con menos de 12 años y un 14% entre los 20 y 23, reduciéndose el porcentaje según aumenta la edad. Así lo aseguró ayer Juanjo Soriano, director de Proyecto Hombre en Málaga, quien presentó la memoria de la Fundación Centro Español de Solidaridad de Málaga (Cesma) de 2011.

El tortuoso camino hacia la drogadicción es similar en todos los casos. Los menores empiezan con el alcohol, el tabaco y el cannabis y, a partir de los 15 años, inician su coqueteo con la cocaína. Conforme avanza la edad, la cocaína se convierte en la gran protagonista acaparando al 45% de los consumidores, si bien su toma se está estabilizando en los últimos años e incluso ha habido ciertos descensos. El cannabis y el alcohol, con un 20% cada uno, le siguen en volumen. Soriano recalcó el peso de las bebidas alcohólicas ya que "son una droga aunque estén legalizadas".

En cualquier caso, lo que más ha llamado la atención de los expertos es que se ha disparado el consumo de heroína hasta el punto de que es la droga principal del 11% de los asistentes a Proyecto Hombre, mientras que hace unos años apenas representaba el 2,5% en Málaga y, según la Encuesta del Plan Nacional sobre Drogas 2009-2010, solo un 0,6% de los ciudadanos se había inyectado alguna vez esta sustancia en España. Soriano señaló que el crecimiento en el consumo de heroína está siendo progresivo en Málaga desde 2008 y lo justificó en que "es más barata y en tiempo de crisis aparece más, a la vez que te evita estar en contacto con la realidad y te adormece".

Proyecto Hombre atendió en Málaga el año pasado a 1.448 personas, un 2% más que en 2010, y el programa que más creció, un 9%, fue precisamente el de adolescentes y menores. De ese número, 263 personas finalizaron el programa de rehabilitación, 18 más que el año anterior. El porcentaje de afectados que consiguen salir por completo del mundo de las drogas es bajo y oscila entre el 15 y el 20%. Proyecto Hombre ha atendido en sus 26 años de historia a 12.000 personas y solo 2.000 han culminado el proceso de rehabilitación.

No es fácil conseguirlo. Muchos afectados no quieren salir, otros tienen todo tipo de problemas mentales o sociales, y otros fallecen. No obstante, Soriano indicó que de esos 10.000 participantes en Proyecto Hombre que no han terminado la rehabilitación, que dura dos años, "hay muchos que están bien y, por ejemplo, un joven me dijo el otro día que quería terminar el proceso pese a llevar 17 años sin tomar nada".

El perfil del drogadicto en Málaga responde mayoritariamente al de un hombre (85%) de entre 25 y 30 años, con ocho años de consumo medio, que lleva un tiempo en paro y que vive con una familia normal. "Las personas adictas han pasado de ser muy visibles a casi invisibles porque a veces trabajan, tienen una familia y llevan una vida aparentemente normal", añadió el director de Proyecto Hombre. También hay mujeres adictas pero suelen empezar más tarde el tratamiento porque "tienen el rol de cuidadora de los demás y se deja para el final".