Un escáner de rostro y huellas, nuevo sistema de seguridad en el aeropuerto

El aeropuerto de Málaga cuenta desde ayer con un novedoso sistema de seguridad que está implantado en varios recintos europeos, pero que aún faltaba en España. De hecho, Málaga es el primer aeropuerto en tenerlo a pleno rendimiento en este país ya que, por ahora, está en proyecto piloto en Barajas (Madrid) y El Prat (Barcelona) y en próximas fechas se instalará en los aeropuertos de Palma de Mallorca, Tenerife Sur, Gerona y Alicante.

Esta tecnología se llama ABC y se utiliza en el control de fronteras. Hasta ahora, cuando un pasajero baja del avión y entra en la terminal malagueña procedente de un vuelo internacional -que son la inmensa mayoría- tenía que hacer cola para el control del pasaporte por parte de la Policía Nacional. Desde ayer, los viajeros que lo deseen podrán evitar esa espera y hacer su propio control a través de una máquina siempre que sean adultos, pertenezcan a algún país de la Unión Europea, Islandia, Noruega, Liechtenstein y Suiza y tengan el pasaporte electrónico o, en el caso de los propios españoles, el DNI electrónico.

El proceso es sencillo. El viajero debe meter su pasaporte en el escáner, poner cualquier dedo para que la máquina le lea la huella dactilar y esperar a que el aparato le haga una fotografía para comprobar que la persona que aparece en el documento de identidad es la misma que está intentando entrar en España. Se exige no llevar, por tanto, guantes ni gafas de sol. No es necesario quitarse las gafas de ver, aunque el sistema podría tardar más tiempo en efectuar el reconocimiento porque habría reflejos con el cristal. La fotografía mide la fisonomía del sujeto (pómulos, ojos, mentón, nariz, etcétera), de forma que no importa que el usuario tenga una apariencia distinta a la fotografía de su pasaporte. Una vez realizado este proceso, suena un pitido y se pasa a un segundo control en el que debe poner el mismo dedo que utilizó anteriormente para volver a reconocer la huella dactilar. En el caso de que se produzca algún tipo de incidencia, un miembro del Cuerpo Nacional de Policía recibe un aviso en su puesto y atiende al viajero directamente.

El sistema está en pruebas desde mayo y ha sido utilizado por unas 40.000 personas en Málaga. Agentes policiales aseguran que, en total, se emplean unos 10 segundos. No obstante, aquellos que no deseen utilizar esta máquina o que no cumplan los requisitos exigidos podrán pasar por el control policial habitual.

El Ministerio del Interior ha invertido 822.800 euros en la instalación del ABC en Málaga, que fue presentada ayer por el secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez; la delegada del gobierno en Andalucía, Carmen Crespo; el delegado del gobierno en Málaga, Jorge Hernández Mollar; el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre; el presidente de la Diputación y del Patronato de Turismo de la Costa del Sol, Elías Bendodo; y el director del aeropuerto, Salvador Merino, entre otras autoridades.

Todos destacaron que este nuevo sistema aporta "rapidez, fiabilidad y eficacia" al aeropuerto de Málaga, reforzando así la seguridad, una de las principales exigencias de los turistas a la hora de escoger este destino. "Esto es un paso más que nos acerca a los líderes mundiales en seguridad aeroportuaria", indicó el secretario de Estado de Seguridad.