Dos espejos en los que mirarse

Pasión, esfuerzo, ganas incesantes de aprender, de superarse, humildad, sencillez, generosidad y respeto. No son palabras facilonas y vacías en el caso de Diana Navarro y Vicente del Bosque. Son retos constantes en las vidas personales y trayectorias profesionales de la cantante y del seleccionador nacional, cualidades que les hacen ser espejos en los que todo el mundo debería mirarse. "Ambos sois ejemplos de lo que es y quiere ser Málaga, ejemplos de vida, gracias por hacernos mejores", dijo el presidente de la Diputación Provincial, Elías Bendodo. Y con esas frases resumía los principales motivos para otorgar los títulos de Hija Predilecta e Hijo Adoptivo a los homenajeados.

En el Auditorio Edgar Neville se celebró la gala que reunió a autoridades, personalidades de la política, la cultura y el deporte como Chucho Valdés, Carlos Álvarez, Salva Ballesta y Fernando Hierro, además de familiares y amigos de los homenajeados. Vestida de negro, la sonrisa de Diana Navarro deslumbraba ayer más que de costumbre. A ella se le dedicó el primer reconocimiento. En la presentación de su figura, Adolfo Arjona y Domi del Postigo hablaron de su esencia flamenca, su quejío y su elegancia. "Desde niña se entregó a los escenarios", dijo Del Postigo, que le dedicó palabras emocionadas a una artista que vio crecer desde los pequeños espacios de las peñas hasta los grandes teatros internacionales.

"Diana Navarro se entrega a lo que hace con inusitada honradez", destacó Domi del Postigo, que también apuntó sus pinitos como actriz en el mediometraje Yocasta. "Está cada vez más en su sitio y ya se atreve con todo", dijo el periodista y subrayó que "cuando canta nos regala un abrazo de vida y música". Y no quiso la malagueña, que ya cuenta con seis trabajos discográficos, que el auditorio se quedara sin comprobar el pellizco que agarra su garganta a capela. Puso en pie a todo el público del teatro al terminar la Salve Marinera que dedicó a este galardón. "Málaga es mi vida, es una manera de sentir, es mi orgullo y siempre he llevado a Málaga por bandera, es fácil presumir de ella, pero también necesario, gracias de corazón", dijo Navarro.

La vida de éxitos del seleccionador que llevó a España a lo más alto del fútbol mundial fue glosada a continuación por su estrecho colaborador y amigo desde la juventud, Toni Grande. Una segunda residencia en San Pedro de Alcántara y "el aprecio y afecto a nuestra tierra" lo vinculan con una provincia "de la que proyecta su nombre y su calidad de vida", como señaló Arjona.

Pero no sólo el gol de Iniesta que hizo soñar despierto a todo un país, el título mundial o la Eurocopa posterior han hecho grande a Vicente del Bosque. También, como subrayó su glosador, "la complicidad con cualquier iniciativa social, su sonrisa y su entrega, su sinceridad, respeto y pasión", comentó Toni Grande.

Fernando Hierro se subió al escenario para entregar el cuadro con el nombramiento de Hijo Adoptivo de la provincia en la que Del Bosque pasa todos los momentos que puede para alejarse del ajetreo de su trabajo. "Intento que representemos bien al país, tener un equipo unido, organizado y si es posible ganar el próximo partido", comentó el seleccionador nacional, que aseguró "llevar dentro este deporte" por el que "sentimos pasión".

Y lo que destacó este salmantino casado con una hija de malagueños fue la capacidad simbólica del fútbol y la necesidad de que los jugadores sean dentro y fuera del campo "referentes morales" a los que muchos jóvenes puedan imitar. Del Bosque también insistió en lo importante del compromiso social y pidió comprensión para las personas con Síndrome de Down en el Día Mundial de este trastorno. "Intentaré ser un buen embajador de Málaga", concluyó del Bosque.

Hubo aplausos calurosos de reconocimiento. Era también una forma de dar las gracias por la suerte de tenerlos cerca.