La desorganización inicial que se produce todos los años en los conservatorios elementales y profesionales no es nueva. La administración educativa tarda en completar las plantillas docentes y es raro que puedan empezar todas las clases cuando está marcado en el calendario. Sin embargo, este curso la situación ha sido aún peor.

En el Conservatorio Gonzalo Martín Tenllado, de los diez cursos que se imparten, tan solo pudieron empezar el 16 de septiembre los alumnos de primero de enseñanza elemental. Y en el Manuel Carra faltaban unos 14 docentes durante la primera semana. Aún ayer faltaban puestos por cubrir y, por tanto, estudiantes por atender.

“Los niños de 8 años de lenguaje musical e instrumento fueron los únicos que pudieron empezar y tampoco todos porque algunos profesores no estaban nombrados”, explica Alejandro Díaz Cobos, director del conservatorio Martín Tenllado. En su centro hay matriculados 890 alumnos. “En este momento somos unos 80 docentes”, agrega.

Conservatorio Gonzalo Martín Tenllado

“El número exacto de profesores del centro se ha concretado más tarde de lo que debería y afectaba a asignaturas troncales como lenguaje musical, armonía y composición, que tienen todos los alumnos del centro”, indica el director. En el comienzo de la segunda semana aún estaban pendientes de llegar ocho profesores, cuyas plazas salieron a colocación el jueves pasado. Se esperaba que a lo largo de ayer lunes se incorporasen al centro.

“La matrícula es del 1 al 10 julio, así que tres días después ya sabemos el número de profesores que necesitamos. La Consejería nos ofrece un número y este año vimos que necesitábamos seis profesores y medio más de lo que ofrecía la Junta”, indica Díaz Cobos. “Lo pedimos en julio, y se nos dijo que se ajustaría en septiembre. De esos seis y medio, cuatro se han concretado el martes 17, después de la fecha del inicio del curso”, añade.

El profesor de oboe René Martín apunta que "el mayor problema de la administración es que no prevé, que no se organizan, así mientras que salen las vacantes y dotan de personal a los centros se ahorran semanas de pago".

Destaca el docente, que las necesidades de profesorado "tendrían que estar previstas en mayo y no en septiembre, falta anticipación a las cosas. Cada 1 de septiembre es como si no hubiese existido un curso previo y todos los años se comete el mismo error". concluye. 

Conservatorio Manuel Carra

En el Conservatorio Manuel Carra hay 1.508 alumnos matriculados este curso, que empezó con la falta de unos 14 profesores sin autorizar. “Tenemos unas enseñanzas muy complicadas de gestionar y Planificación no sabe atender estas particularidades”, considera Enrique Bazaga, director del Manuel Carra.

En su centro empezaron los alumnos que tenían profesores asignados pero muchos aún no saben cuándo podrán iniciar su formación. “De la petición de 12 cupos y medio que hicimos a Educación ha sido atendida un 50%, del resto no sabemos todavía nada, ahora mismo hay muchos niños sin clase”, indica Bazaga.

“Se ha desmadrado un poco la situación este año por una falta de previsión”, considera y también explica que al autorizarse las enseñanzas de tercero y cuarto en los conservatorios de Torre del Mar, Antequera y Ronda hay menos abandono y son un buen número de estudiantes los que se desplazan a Málaga para terminar sus dos años de profesional. Unas matrículas con las que, al parecer, no se contaban.