“Son unos días de locos”, reconoce la vicetesorera del Colegio de Farmacéuticos de Málaga (Icofma), Montserrat de Cuadra. No es para menos. La institución tiene que hacer la mudanza a su nueva sede. El cambio está previsto para dentro de un mes, aproximadamente. De Cuadra apunta que aunque casi todo está ya digitalizado, “es una mudanza, con todo el trajín que implica”.

Así que son unos días de mucho trabajo, pero también de mucha ilusión para el colectivo. Porque dentro de mes o como mucho mes y medio, estrenarán sede. “Se están rematando los flecos de la obra y ya tenemos pedida la licencia de primera ocupación”, precisa la vicetesorera.

El moderno edificio, ubicado en la Avenida Carlos Haya, consta de dos plantas y terraza. Ha costado unos 3 millones de euros. “Estamos orgullosos de la nueva sede. Hemos conseguido mantener el presupuesto en sus cauces, con una desviación inferior al 5%, pese al aumento de los precios”, señala De Cuadra.

El diseño del mismo ha corrido a cargo del estudio de arquitectura OCWA (Office for co. Working Architects) que también firma la ampliación Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Málaga. La concepción, apuntan desde el estudio, parte de la idea de manzana cerrada en la que el patio es protagonista y ágora de la vida colegial, el edificio se va perforando y fragmentando en planta baja para dar lugar a los diferentes accesos del edif icio, así como para conservar la arboleda preexistente en la parcela

Además, el proyecto no ha supuesto una contribución extra para los miembros del Colegio. “El edificio es de todos los colegiados sin aumento de cuotas ni ninguna otra aportación”, explica la vicetesorera. La futura sede colegial supondrá una mejora, además de porque es un edificio nuevo y moderno, porque unificará servicios que ahora la entidad tiene en dos ubicaciones diferentes: la Alameda de Colón –donde está la parte administrativa– y la Avenida de Andalucía –donde se encuentran el área técnica, laboratorios y el Centro de Información del Medicamento–. La futura sede lo albergará todo.

Además, el Colegio alquilará una parte del edificio a la empresa externa encargada de la facturación de recetas y que en la actualidad se localiza en el polígono Alameda. De modo que con el nuevo edificio, todos los servicios que precisan los farmacéuticos malagueños se concentrarán en un mismo inmueble.

De Cuadra destaca que la institución ha priorizado la sostenibilidad de las instalaciones sobre criterios económicos. El edificio cuenta con placas solares, es autosostenido y se ha construido con materiales no contaminantes.

El Colegio ya tiene vendida su actual sede de la Alameda de Colón, en la que aún funciona su parte administrativa. En cambio, el edificio de Avenida de Andalucía todavía es de su propiedad. Cuenta la vicesecretaria que tuvieron una “actitud conservadora” a la hora de sacar a la venta este otro edificio por si el proyecto de la nueva sede sufría retrasos.

En torno a la mitad del proyecto de la Avenida Carlos Haya se financia con la venta de las actuales sedes y el resto, con una hipoteca. La obra de la nueva sede ha sido a muy buen ritmo ya que obtuvo la licencia en mayo de 2021. El proyecto –que ya es casi realidad– contempla un edificio de más de 1.800 metros cuadrados.

La actual sede de la Alameda de Colón ya hace tiempo que se había quedado pequeña y no permitía hacer una gran reforma. Por eso, la directiva colegial abordó la iniciativa de un nuevo edificio. En la provincia de Málaga hay en torno a 700 farmacias y unos 2.200 colegiados. El Colegio se creó en 1889 y desde 1966 está en la sede actual.