Vecinos alertan de un par de gaviotas moribundas en la playa de La Misericordia de Málaga

La tranquilidad de la playa de la Misericordia se rompió este lunes por la mañana cuando varios bañistas avistaron a dos gaviotas moribundas y agonizando en la orilla del arenal malagueño.

Los testigos avisaron de inmediato a las autoridades locales, preocupados por la salud de las aves y por la posible relación con la sospecha de gripe aviar que ha llevado al Ayuntamiento de Málaga a cerrar el Parque de Huelin. La escena generó alarma entre los vecinos, conscientes de las sospechas de que el virus ha llegado en Málaga y a otras provincias andaluzas en los últimos días.

Entre los presentes estaba Carmen Viedma, vecina del barrio de Las Delicias, que no dudó en registrar la escena con su teléfono móvil. “La gaviota venía del mar y apenas podía moverse, se quedó en la orilla. Pero es que dentro del agua había otra igual, prácticamente moribunda. Era impactante”, recuerda.

Junto a ella, varias mujeres intentaban contactar con diferentes organismos: SEPRONA, Medio Ambiente y la Policía Local. “Les decían que al ser día de fiesta no sabían si podían mandar a alguien. Otros que hoy era un día complicado”, relata la vecina.

En barrios como Las Delicias, donde las gaviotas forman parte del paisaje cotidiano, la preocupación crece. “Aquí se ven por todos lados, del parque del Oeste a la Misericordia. Es su hábitat. Eso preocupa, porque la posible enfermedad puede propagarse fácilmente entre ellas”, resume Carmen.

Finalmente, la vecina optó por marcharse, aunque se llevó consigo la inquietud: “Es la primera vez que lo veo, me ha impactado mucho. Yo ya me fui, pero pensé: al menos lo grabo y lo dejo registrado, porque con todo lo que se escucha de la gripe aviar, esto tiene toda la pinta”.

El precedente de Huelin

La aparición de las aves moribundas en la playa se produce pocos días después de que el parque de Huelin fuera cerrado al público tras la muerte de decenas de ejemplares —entre ellos patos, fochas y gaviotas— con sospecha de gripe aviar.

El caso no solo generó malestar vecinal, sino también preocupación laboral: varios empleados del parque aseguraron tener síntomas compatibles con la enfermedad y pidieron pruebas médicas urgentes. Aunque hasta la fecha no se ha confirmado ningún contagio en personas, pero varios vecinos de Málaga han llevado diligencias a la Fiscalía de Medio Ambiente para intentar esclarecer la gestión de lo ocurrido.

Los episodios de Málaga se suman a los registrados en otras provincias. En Sevilla, la Junta clausuró el parque del Tamarguillo y Miraflores y reforzó la vigilancia en el Real Alcázar tras la muerte de más de 70 aves. En Huelva, un brote confirmado en una granja de El Cerro de Andévalo obligó al sacrificio de todas las aves de corral y al establecimiento de un perímetro de seguridad de diez kilómetros.

La administración andaluza ha activado un protocolo de prevención que implica la vigilancia reforzada en espacios como Doñana, la retirada de cadáveres con equipos de bioseguridad y el seguimiento de unas 25 personas que pudieron estar en contacto con aves enfermas. Hasta ahora, ninguna ha resultado contagiada.

Los expertos llaman a la calma. Virólogos de la Universidad de Málaga insisten en que la gripe aviar H5N1 rara vez se transmite a humanos y que el riesgo actual es “muy bajo”, aunque subrayan la importancia de mantener la vigilancia y evitar cualquier contacto directo con aves muertas o enfermas.

La imagen de dos gaviotas agonizando en la playa de la Misericordia se ha convertido en un nuevo motivo de inquietud en Málaga. Este pasado fin de semana las redes sociales se hicieron eco cuando se avistaron varias palomas muertas en la calle en diferentes barrios de la ciudad. Mientras las autoridades aseguran que la situación está bajo control, en barrios como Las Delicias el miedo se mezcla con la resignación.

“Se veía que se iba a morir el animal allí… Y eso te deja intranquila”, concluye Carmen, todavía marcada por la escena vivida en la arena.