El Gobierno quiere usar la torre de la Sareb en Repsol para hacer viviendas asequibles en Málaga

El Gobierno también tiene planes para los terrenos de Repsol. Y pasan por edificar. Una de las parcelas de los suelos junto a Juan XXIII en Málaga están en manos de lo que antes era el banco malo, la Sareb, pero que ahora el Gobierno ha integrado como Casa47, el ente por el que pretende promover, construir y gestionar un parque público de vivienda asequible. Y en sus planes no está deshacerse del aprovechamiento, sino construir en él vivienda asequible.

Como confirman a este periódico desde la entidad pública (formada de la unión de Sareb y Sepes, el banco malo y la sociedad de suelos), la intención gubernamental, si bien aún debe cristalizarse, es desarrollar vivienda asequible en el emplazamiento. Cabe recordar que a Sareb pertenecen los suelos con un mayor aprovechamiento. Hasta 35 alturas que podrían levantarse donde se calcularon, hace una década, más de 400 viviendas, además de usos terciarios. Este dato hoy es orientativo y dependerá, evidentemente, de la distribución final de los pisos resultantes, si es que se termina por edificar.

Antes de eso deberán salvar un escollo proveniente del propio Gobierno. La delegación de Carreteras no da el visto bueno a la propuesta de movilidad de la zona, lo que coartaría la posibilidad de construir en un área ya colmatada de vehículos si no se encuentra una solución, en lo que trabaja el Ayuntamiento sin, de momento, demasiado éxito. El problema es conectar la MA-20, la carretera nacional, con el Bulevar Alfonso Suárez. De momento, la negativa estatal radica en que el enlace con la vía que propone el Consistorio es demasiado próximo a uno ya existente, incumpliendo la separación mínima necesaria por ley.

No es el único desarrollo que se prevé en la parcela. Siempre, claro, que se desatasque la venta de los suelos que el Ayuntamiento tiene parada –y judicializada– después de que la plataforma Bosque Urbano Málaga (BUM), primero, y la promotora que ganó la enajenación de los suelos por más de 60 millones, Urbania, después, lo llevasen a tribunales por motivos distintos. De completarse la venta, y permitirse la construcción, Urbania prevé otras tres grandes torres con usos complementarios, viviendas de lujo, oficinas, comercios e, incluso, otras más de 400 viviendas de protección oficial.

Bosque Urbano pretende que no se edifique en la parcela: quiere un parque en el conjunto de los suelos que sirva como pulmón verde en Carretera de Cádiz. Y, además de avanzar en la vía judicial contra la venta –y también cuestionando la descontaminación de los terrenos en los que estuvieron los depósitos de petróleo de Repsol–, también son muy activos preguntando por la citada imposibilidad de garantizar la movilidad.

Primero, exigieron a la Junta de Andalucía que paralizasen cualquier desarrollo urbanístico en los terrenos de Repsol por no tener garantizada la movilidad en el entorno. La entidad ha solicitado tanto a Patricia Navarro, delegada en Málaga, como a María Rosa Morales, responsable de Fomento en la provincia, una reunión para explicarles por qué, la falta de infraestructuras que conecten el bulevar Adolfo Suárez con la MA-20 "es más que suficiente para frenar" cualquier construcción en la parcela. También se reunieron con el subdelegado del Gobierno en Málaga, Javier Salas, que confirmó que ahora mismo es un escollo que no está salvado.

Con esto, Repsol, de momento, tiene bloqueado cualquier intención de edificar. Aunque el Ayuntamiento de Málaga ya ha verbalizado su intención de avanzar en la urbanización del terreno, que empezará por el futuro parque, que han propuesto llamar "Papa Francisco", por la proximidad a la avenida Juan XXIII y al puente de Juan Pablo II, dijo el alcalde.

Casa47 en Málaga

Del resto de activos de Casa47 en Málaga poco se sabe de momento. Lo cierto es que Sareb tenía 440 viviendas de su propiedad que se movilizarán directamente al futuro parque público. Además de Repsol, tiene suelos, precisan desde el ente, en Manilva, Estepona, Alhaurín el Grande, Ronda, Vélez-Málaga, Torrox y Casares. A lo que hay que añadir las 1.362 viviendas asequibles de la actuación Buenavista en la ciudad de Málaga, en este momento pendiente de la aprobación definitiva del proyecto de urbanización para su desarrollo.