tromba

Las inundaciones dejan sin agua a 15.000 vecinos del interior de la provincia

  • Campillos y Teba no tienen previsión de recuperar el servicio de abastecimiento

  • Benaoján solicitó ayer a la Legión la instalación de aljibes

Un voluntario durante las labores de limpieza en Campillos.

Un voluntario durante las labores de limpieza en Campillos. / Javier Flores

Los daños en las zonas más afectadas por las lluvias torrenciales son muchos y los problemas a los que se enfrentan sus vecinos también. Una de las consecuencias de la tromba es ahora la falta de abastecimiento de agua potable en diferentes municipios, que suman una población de unos 15.000 habitantes.

En el caso de Campillos y Teba la situación es extrema, ya que carecen de agua en sus grifos y el Consistorio no tienen todavía una fecha prevista para poder reparar las averías que hacen que el suministro esté interrumpido.

En este sentido, el alcalde de Campillos, Francisco Guerrero, explicaba ayer que habían pedido ayuda a la Unidad Militar de Emergencias (UME) para tratar de abrir un camino de acceso al punto en el que se encuentra la avería en la conducción de suministro y construir una infraestructura para poder sostener las tuberías, ya que la avería es de importantes dimensiones y el Consistorio con sus medios no tienen posibilidad de acometer este trabajo.Mientras tanto, los peritos comenzaron ayer a visitar las viviendas para evaluar los daños que se han producido en las mismas.

Por sus parte, en Teba, según indicó su alcalde, Cristóbal Corral, “estamos despertando, estamos viendo la importancia del daño que hemos tenido”. Además, explicó que llevan registradas 100 solicitudes de ayudas de personas que han tenido daños “muy graves”. En el caso de esta localidad tampoco cuentan con servicio de agua y no tienen previsión para su reparación.

En Teba los daños en explotaciones son muy numerosos con pérdidas de animales. “Tardaremos semanas en poder restituir el servicio”, indicaba Corral, que también apuntó a las importantes pérdidas en explotaciones ganaderas y agrícolas, con muerte de animales, daños en olivos y centros de producción que no pueden abrir sus puertas en plena campaña, como es el caso de la cooperativa de aceitunas. En una de las explotaciones porcinas de la zona, la imagen deja a cientos de cerdos muertos y a sus propietarios desesperados. Ellos, como el propio regidor, se quejan de la falta de limpieza del río. “El agua iba por fuera del cauce antes de la riada”, afirman. El Consistorio había pedido la limpieza del mismo pocos días antes de las inundaciones, según indicó Corral.

Mientras tanto, Benaoján recurrió a pedir ayuda a la Legión para suministrar agua potable a sus vecinos ante la imposibilidad de hacer uso de la que llega a sus casas, un hecho que afecta especialmente a la industria cárnica de la localidad, que se encuentra en plena campaña de producción y tiene importantes necesidades de consumo.

El Consistorio recurrió a una empresa especializada para aportar 25.000 litros de agua para paliar en lo posible sus necesidades. “Tenemos un problema muy importante”, indicaba la alcaldesa de Benaoján, Soraya García, que agradeció la disposición de la Legión para colaborar.

Entre tanto, las solicitudes de indemnización siguen llegando al Consorcio de Compensación de Seguros. Hasta ayer, este organismo dependiente del Ministerio de Economía había recibido 728 peticiones procedentes de una treintena de municipios. Pero sin dudas, la peor parte se la ha llevado Campillos. De esa cifra, casi la mitad –331– corresponden a esta localidad. Los otros tres municipios en los que se han registrado más peticiones son Estepona (136), Ronda (81) y Antequera (56).

De las 728 solicitudes, 374 corresponden a daños ocasionados en viviendas, 251 en vehículos, 86 en comercios, oficinas o naves y 17 en industrias. La mayoría se han presentado por teléfono (71%) y el resto (29%) a través de internet.

“Con el ritmo de entrada de solicitudes, prevemos que la cifra total rondará las 4.000 por 34 millones de euros”, estimó el director de Operaciones del Consorcio, Alejandro Izuzquiza. Estas estimaciones de daños rebajan los afectados, pero elevan la cuantía total inicial dada el primer día después de la tromba.

Puede haber muchos más bienes dañados, pero el Consorcio responde frente a aquellos que están asegurados.

Izuzquiza mantuvo su previsión de que en torno a 10 días después de la tromba empezarán a pagarse las primeras indemnizaciones y que el 90% estarán liquidadas en unos cuatro meses. El Consorcio tiene en la actualidad para gestionar 2.060 peticiones de indemnización, ya que a las 728 de la tromba del domingo en Campillos se suman las del puente del Pilar, que ascienden a 1.332 en la provincia y que proceden de Marbella (896), Estepona (102), Coín (61) y Alhaurín el Grande (60). Los primeros pagos de los daños del puente del Pilar ya han comenzado a realizarse.

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