Málaga invertirá 30 millones en cuatro años para mejorar el tráfico en su entrada por Valle Inclán

Uno de los puntos negros de la movilidad en Málaga, no sólo conocido en el Ayuntamiento, sino señalado por la Dirección General de Tráfico (DGT) es la avenida Valle Inclán. La conexión por el norte de la ciudad es una de las más usadas, a la vez que saturadas, y genera continuos atascos a las horas punta, además de ser un verdadero tapón al mínimo alcance que se produzca en la zona. Por ello el Consistorio prevé invertir 30,6 millones de euros en los próximos cuatro años para ponerle solución a su entrada norte.

Hay que destacar que, según los últimos datos públicos del Ayuntamiento de Málaga, correspondientes al segundo cuatrimestre (mayo a agosto) de 2025, la avenida Valle Inclán en sentido este es la segunda vía de la ciudad que mayor intensidad de tráfico soporta, con sólo 500 vehículos de media menos que avenida Andalucía, otra de las entradas a la ciudad. Ambas por encima de las 32.000 circulaciones diarias. Algo más baja en su sentido oeste, que se queda en más de 25.000 movimientos.

Con esto, en el Presupuesto para 2026, aprobado previamente por la Junta de Gobierno Local y a la espera de que dé su visto bueno definitivo en Pleno, se reservan 400.000 euros para la redacción del proyecto de su remodelación. Este es el primer paso necesario antes de empezar una obra que pretende cambiar el entorno. El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, señaló durante la presentación que se tratará de un "paso inferior de la avenida Valle Inclán, pasando por encima de las conexiones de Camino Suárez y Martínez de la Rosa hacia el norte", añadiendo que para la movilidad "es importante resolverlo".

Pero, evidentemente, con el proyecto no se aprecia la magnitud de la obra a realizar. De ahí que en plan de inversiones cuatrienales sí hayan dibujado una mayor cuantía, 30,2 millones de euros, para acometer la transformación. Estos se dividen en 9,15 millones en 2027, otros 14 millones en 2028 y una última cuantía de 7 millones en 2029, último año que recoge la prospectiva de las cuentas. Esto no implica que no se pueda seguir invirtiendo en 2030.

Cabe recordar que, además, en este punto se espera que aumente el tráfico una vez se haya transformado el ámbito de la antigua fábrica de ladrillos de Salyt, que se convertirá en un centro comercial por iniciativa privada. Además de los comercios vendrá de la mano de un nuevo parque, zonas verdes y más zonas de aparcamiento. Estos deberán acarrear nuevas salidas y accesos desde Salyt hacia Valle Inclán y desde Valle Inclán hasta Arroyo El Cuarto. Como recogió, por otra parte, el programa electoral del PP en 2023.

Además, vendría a acompasarse con la actuación que proyecta Málaga y su alcalde en el Guadalmedina. Si bien la parte más vistosa es la que tiene que ver con los puentes plaza que se crean sobre el río, también contempla una fuerte renovación de los viarios, con el soterramiento de todo el tráfico en la zona. Este es necesario para poder acometer la integración urbana de ambos lechos del río que propone el alcalde.

En los documentos actuales se proyectan dos túneles (que se harán por la técnica de cut & cover, como los del Metro de Málaga) en la avenida de Fátima y el Pasillo de Santo Domingo, por la derecha –de 500 metros que prolongará el actual– y en la avenida de la Rosaleda y Pasillo de Santa Isabel, por la izquierda –este, más largo, de 1.400 metros–. Con esto se podrán crear dos bulevares en ambas zonas.

El coste total será de 298, 4 millones de euros, para los que el alcalde de Málaga buscará financiación de Europa, pero también del Estado central y la Junta de Andalucía. Justamente los túneles son la parte más cara de la tarta. Aunque también la excusa que esgrime el alcalde para poder recabar financiación de las administraciones en tanto que, afirmó, la conexión norte-sur que generará es clave para el Puerto de Málaga y su salida a la autovía, que ahora mismo sólo puede hacerse por la calle Pacífico y hacia el oeste.