La Comisión de Gestión de la Sequía de las Cuencas Mediterráneas ha acordado este viernes mantener las medidas para conseguir un ahorro de agua, para lo que es necesario el aprovechamiento máximo de las aguas regeneradas y limitar el uso de agua potable en el baldeo de calles y jardines.

Esta situación ya estaba fijada para los sistemas de La Viñuela, Campo de Gibraltar, Benínar y Cuevas del Almazora y ahora se suman, aunque en menor medida, los de Guadalhorce-Limonero y Costa del Sol Occidental, a los que se establece un 10% de limitación, ha informado la Junta en un comunicado.

Esta decisión viene a "garantizar tanto el abastecimiento a la población la normalidad de la actividad diaria del sector turístico en estos momentos de sequía", ha afirmado el secretario general del Agua, Ramiro Angulo, en la reunión de esta Comisión celebrada en Málaga.

En esta reunión se ha informado de que las pasadas lluvias se han concentrado en la parte más oriental de la demarcación en las provincias de Granada y Almería, mientras que en la zona occidental (provincias de Cádiz y Málaga) las precipitaciones han afectado fundamentalmente a las áreas situadas aguas abajo de los embalses.

Por ello, no se han producido cambios significativos respecto a las hipótesis manejadas en abril en las zonas con regulación superficial y, por tanto, persiste el carácter de año muy seco en la cuenca.

Angulo ha recordado "el inminente comienzo de las obras de ampliación de la desaladora de Marbella, que vendrá a duplicar de 6 a 12 hectómetros cúbicos su capacidad", así como la apuesta por el agua regenerada, que permitirá poner a disposición de los regantes de la Axarquía 23 hectómetros cúbicos adicionales de agua tras el verano.

Asimismo, Angulo, ha dado a conocer los planes hidrológicos que, a la espera del Consejo Nacional del Agua para su aprobación definitiva, contempla actuaciones importantes para garantizar la seguridad hídrica de Andalucía.

Al término de la Comisión, el presidente y secretario general del Agua ha querido "agradecer el enorme esfuerzo y la comprensión de todos los usuarios, ayuntamientos, regantes, organizaciones agrarias y asociaciones que realizan ante el mantenimiento de las medidas limitantes del uso del agua, así como el impulso de campañas de concienciación de implantar entre sus poblaciones y asociados un uso eficiente del agua".

Hace dos meses, cuando todavía había esperanzas de que la primavera trajese lluvias de consideración a la provincia de Málaga, la Comisión de Sequía se reunió en Málaga y acordó mantener las restricciones establecidas en la Axarquía y en el sistema de Guadalhorce-Limonero. 

Asimismo, decidió mantener las restricciones en el sistema de Guadalhorce Limonero, aunque de forma condicionada al comportamiento de la pluviometría de los próximos meses. En la Comisión se explicó que en el sistema de La Viñuela persiste la situación de emergencia agravada debido a un año donde las precipitaciones han estado muy por debajo de la media histórica.

Actualmente, la situación de los embalses de Málaga es crítica. El agua de los siete pantanos de la provincia no deja de descender, ya que las lluvias que se dieron hace unos días no fueron de importancia y no han supuesto cambios en el agua embalsada. En total quedan 196 hectómetros cúbicos, dos menos que hace una semana. Por lo que, los embalses de Málaga están al 32% de su capacidad.

En junio de 2022 la provincia estaba sumida también en esta sequía, pero la situación era diferente, puesto que, en total, los hectómetros cúbicos sumaban juntos unos 320. Esto quiere decir que en estos momentos hay 166 hectómetros cúbicos menos de agua almacenada en Málaga que hace un año. Sin embargo, por el momento no se prevén restricciones en el consumo humano y no se prevé que tenga tampoco efectos a corto plazo en el sector turístico.