La oposición pide al alcalde de Málaga que "pida perdón" por la renuncia al Mundial

La renuncia de Málaga a ser una de las sedes del Mundial 2030 ha abierto una nueva grieta política en el Ayuntamiento. Y de las grandes. Durante el Pleno extraordinario solicitado por el PSOE, los grupos de la oposición han exigido explicaciones al alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, a quien han reclamado que asuma responsabilidades por lo que consideran “el mayor fracaso institucional en décadas”. El portavoz socialista, Dani Pérez, ha encabezado las críticas pidiendo que el regidor “pida perdón” a la ciudad, mientras que Nicolás Sguiglia (Con Málaga) ha lamentado que De la Torre haya perdido “una oportunidad de oro para reconocer errores y disculparse”.

Las acusaciones han girado en torno a la gestión del proyecto y las consecuencias negativas para la imagen de la ciudad. “Usted sabía desde hace un año que la remodelación era inviable y, aun así, firmó una carta en mayo diciendo que sí se podía hacer”, ha denunciado Pérez, mostrando una fotografía del 23 de marzo en la que el alcalde anunciaba la candidatura con entusiasmo. “Han engañado a toda Málaga”, ha insistido.

Por su parte, De la Torre ha defendido con firmeza la decisión de abandonar la carrera por el Mundial, asegurando que se ha actuado con responsabilidad ante la imposibilidad de cumplir con los plazos exigidos por la FIFA. “Esta ciudad merece un equipo fuerte, en Primera, y un estadio a la altura. No merecía la pena comprometer al Málaga Club de Fútbol por tres partidos”, ha afirmado. Asimismo, ha subrayado que “somos un ejemplo de responsabilidad política; ante la expectativa de no poder cumplir los plazos, nos hemos retirado”. Además, ha negado que se haya ocultado información y ha garantizado que los informes técnicos están disponibles para todos los grupos políticos.

El propio De la Torre ha respondido que “en ningún momento se ha ocultado información” y ha recordado que los informes están disponibles para todos los grupos. Ha insistido en que su equipo ha actuado con responsabilidad y ha negado que se haya mentido a la ciudad. Además, ha recalcado que los problemas logísticos y económicos que implicaba el traslado del Málaga CF a otro estadio hacían inviable continuar con el proyecto sin afectar al club. “Hubiera sido un riesgo brutal que una ciudad como esta no cumpliera los plazos”, ha asegurado.

En esa misma línea se ha expresado el administrador judicial del Málaga CF, José María Muñoz, quien ha asegurado que la posición del club “siempre ha sido de sí al Mundial, pero nunca a costa de perjudicar al Málaga ni a la afición”. Ha explicado que su labor es proteger la viabilidad económica y deportiva de la entidad, y que el traslado al Estadio Ciudad de Málaga habría supuesto un impacto grave: desde la pérdida de ingresos hasta despidos. “Ese traslado hubiese implicado un ERE para 25 trabajadores del club”, ha señalado.

Muñoz ha detallado que el perjuicio no era solo cuantitativo, sino también cualitativo. En lo económico, ha explicado que, desde su llegada, el club ha pasado de vender 55.000 a 250.000 artículos anuales, gracias en buena parte al buen funcionamiento de la tienda oficial y del museo, espacios que se verían cerrados por las obras. Además, ha recordado que más de 160 empresas están vinculadas actualmente al club, en un ecosistema que también se habría visto comprometido. En lo operativo, ha advertido que todo el personal —desde técnicos hasta administración y servicios— habría tenido que trasladarse a la ciudad deportiva, donde sería necesario construir nuevas instalaciones con un alto coste. “Estudiamos todo: el impacto en público, en jugadores, en estructura… y la conclusión fue clara: no compensaba”.

Por su parte, el concejal de Deportes, Borja Vivas, ha reforzado esta posición, argumentando los riesgos económicos y deportivos que suponían seguir adelante con la remodelación de La Rosaleda. Ha señalado de que jugar en el Estadio Ciudad de Málaga, con solo 12.500 localidades, habría generado pérdidas de entre cinco y seis millones de euros por temporada.

“¿Quién iba a pagar eso? Los malagueños”, ha planteado. Además, ha añadido que el rendimiento deportivo también se habría visto afectado: “Según los técnicos, el club podría haber perdido entre 14 y 16 puntos por temporada”. También ha revelado que, un día antes del anuncio oficial, la Liga de Fútbol Profesional envió un informe alertando de que la operación ponía en riesgo el límite salarial del club. “Incluso este año ya hay problemas para fichar”, ha advertido.

Desde la oposición, estas explicaciones no han convencido. Dani Pérez ha insistido en que toda esa información se conocía antes de anunciar la candidatura: “Sabían perfectamente que no se llegaba a los plazos y estos costes de los que está hablando. Aun así, hicieron promesas en plena campaña electoral. Han mentido a Málaga”. Ha reclamado que el alcalde asuma su responsabilidad y ha lamentado que “ni siquiera haya pedido perdón”.

Una crítica compartida por el portavoz de Con Málaga, Nicolás Sguiglia, quien ha calificado el proyecto como “otro fracaso más” del mandato de De la Torre. Ha acusado al alcalde de practicar “la propaganda y la venta de humo” y ha lamentado que haya perdido “una oportunidad de oro para pedir disculpas y asumir errores”. “Esto se suma a la Expo, a la Ciudad de la Cultura o a la Capital Europea de la Innovación. Puro humo”, ha sentenciado. Además, el portavoz de la agrupación política, al igual que Dani Pérez, ha señalado la irresposabilidad que ha supuesto el seguir adelante con el proyecto aún a sabiendas de las perdidas económicas que podían suponer para Málaga y ha acusado de utilizarlo ahora de "arma arrijadija para el debate".

Por parte de la afición también se han escuchado voces de apoyo al proyecto inicial, aunque marcando claramente los límites. José León, presidente adjunto de la Federación de Peñas del Málaga, ha asegurado que “todos queríamos el Mundial, pero no a cualquier precio”. Ha criticado que el traslado al Estadio Ciudad de Málaga dejaba fuera a miles de abonados y ha recalcado que “la línea roja era clara: sí al Mundial, pero sin perjudicar al club ni a los aficionados”. Asimismo, ha pedido que ahora, tras la renuncia, se pase del debate al compromiso: “Queremos un nuevo estadio para el Málaga”.

En su intervención final, De la Torre ha insistido en que el proyecto del Mundial no merecía poner en juego la estabilidad del club. “Tres partidos no justifican todo este sacrificio. Lo importante no era el Mundial, era el estadio, y ese estadio lo vamos a hacer”, ha prometido. Ha concluido asegurando que ahora el reto es mirar al futuro, estudiar bien las opciones y construir una nueva Rosaleda, con capacidad para 45.000 espectadores, que esté a la altura de la ciudad y del equipo. “Queremos un Málaga fuerte, en Primera, y con una afición que no tenga que renunciar a nada”, ha zanjado.

En este nuevo escenario, ha comenzado a abrirse el debate sobre la futura ubicación del estadio, un asunto que, como ha reconocido el propio alcalde, presenta más desafíos urbanísticos que deportivos. De la Torre ha recordado que las tres administraciones implicadas disponen aún de parte del presupuesto reservado para estudios previos —unos 700.000 euros, de los que se han gastado menos de 500.000—, y ha señalado que con esos fondos se podrá elaborar un análisis técnico que determine el lugar idóneo para la construcción del nuevo estadio.

Entre las posibles ubicaciones, el regidor ha mencionado varios espacios, aunque ha advertido de la limitación que supone la geografía de la ciudad: “Málaga no tiene muchos terrenos llanos disponibles, lo que la hace una ciudad maravillosa, pero también complica este tipo de proyectos”, ha apuntado. Entre las opciones, ha citado una parcela en la zona de las rondas, cerca de la antigua venta de San Cayetano, en el distrito de Puerto de la Torre, recogida ya en el PGOU desde hace años, aunque ha reconocido que presenta dificultades de conectividad.

Otra posibilidad es una zona rústica situada detrás del cerro Coronado, que podría tener vocación para uso deportivo, aunque su viabilidad urbanística está aún por determinar. Asimismo, ha señalado un suelo cedido anteriormente a la Universidad de Málaga, destinado a equipamiento deportivo, que podría ser “idóneo”. También ha abierto la puerta a una alternativa en la zona de Campanillas, aunque ha descartado los terrenos de la Expo por estar comprometidos con otros desarrollos. “En cualquier caso, el estudio aún no está hecho y, cuando lo esté, cualquier persona de las peñas y la afición malaguista tendrá acceso a él”, ha garantizado.