La oposición exige revertir licencias de viviendas turísticas ya existentes en Málaga

Los grupos de la oposición PSOE y Con Málaga no están satisfechos con la moratoria a las nuevas viviendas turísticas, y han reclamado al alcalde de la capital, Francisco de la Torre, "que vaya más allá" y adopte medidas para eliminar licencias ya existentes.

La decisión de la moratoria de un máximo de tres años a las nuevas viviendas turísticas, está prevista aprobarse este jueves en la junta de gobierno local y entrará en vigor dentro de aproximadamente una semana, cuando se publique en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP). "No habrá ni una más durante tres años", sentenció el alcalde, Francisco de la Torre.

Los grupos de izquierdas consideran que "llega tarde" la suspensión de inscripciones que conlleva el inicio del procedimiento para la modificación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) -el vigente es de 2011- con el fin de regular el uso residencial y turístico y adaptarlo a la actual situación socioeconómica de la ciudad.

Según los datos facilitados por el regidor de Málaga, la capital cuenta con más de 12.700 viviendas de uso turístico registradas en la actualidad. El portavoz municipal del PSOE, Daniel Pérez, ha criticado que el Ayuntamiento se limite a frenar las futuras licencias sin tocar las actuales, ya que "eso no va a aliviar el mercado del alquiler ni va a devolver las viviendas a los vecinos".

Mientras que los socialistas reclaman que Málaga "siga el ejemplo de Barcelona", cuyo alcalde ha anunciado la eliminación progresiva de todas las licencias de pisos turísticos, y desarrolle un plan de recuperación de vivienda residencial, Con Málaga demanda medidas que permitan revertir las licencias turísticas ya existentes para transformar esas viviendas en alquileres residenciales.

El portavoz de la confluencia de Podemos e IU, Nico Sguiglia, ha calificado este jueves la situación de las viviendas turísticas en Málaga como "una auténtica selva", a su juicio fruto de la "inacción" del PP en la última década para regular y controlar un fenómeno que "ha crecido de forma exponencial y ha generado graves problemas para el acceso a la vivienda y la convivencia".

"Las casi 13.000 viviendas turísticas existentes se podrían haber evitado si el alcalde hubiera priorizado el derecho a la vivienda antes que el negocio de unos pocos, y el PGOU vigente le permitía implementar una regulación mucho más estricta, pero decidió no hacer nada", ha señalado.

La moratoria "llega muy tarde, cuando Málaga encabeza los 'ranking' del número de viviendas turísticas y del precio de la vivienda", ha afirmado.

"No basta con impedir nuevas licencias, necesitamos medidas para revertir las ya existentes", ha reclamado Sguiglia, que ha apostado por disminuir "drásticamente" el número de viviendas de uso turístico y transformar esos alojamientos en alquileres asequibles.

Asimismo, ha pedido al alcalde que ponga en marcha con carácter urgente un programa municipal de inspección de viviendas turísticas ilegales, que se anuncian pese a no contar con las correspondientes licencias.