Las lluvias de la pasada semana, que dejaron hasta más de 100 litros por metro cuadrado en algunos puntos de la provincia durante dos días, principalmente en el Valle del Guadalhorce y la costa occidental, han proporcionado casi cuatro hectómetros cúbicos más de agua a los pantanos malagueños. Pero esto no supone que haya cambiado en exceso su situación. En porcentaje, los embalses siguen estando en el 37,53% de su capacidad, tan solo medio punto por encima de lo registrado la semana anterior. 

Los siete pantanos de la provincia de Málaga acumulan 229,51 hectómetros cúbicos cuando tienen una capacidad para 611,48. El pasado martes, 7 de febrero, había 225,61 hectómetros recogidos. También hay diferencia con respecto al año pasado, ya que después de las últimas precipitaciones los embalses reúnen 30,5 hectómetros más de los registrados del 14 de febrero de 2022, según los datos de la red Hidrosur. 

Eso sí, hay tres embalses que tienen hoy menos agua acumulada que hace un año y la pérdida más significativa sigue siendo la del pantano de la Viñuela, que se encuentra al 11% de su capacidad. Este pantano, con capacidad para almacenar 164 hectómetros cúbicos, el más grande de toda la provincia, cuenta con 18,12 en estos momentos. La pasada semana estaba en 18,19 hectómetros, por lo que el consumo es mayor a la entrada de nuevos caudales. Hace un año, tenía 23,8 hectómetros cúbicos. 

En el 30,7% de su capacidad se encuentra el embalse del Conde de Guadalhorce, que guarda algo más de 20 hectómetros cúbicos. Y 45 tiene el pantano del Guadalhorce, al 36,2% de su capacidad. El embalse del Limonero es el que menor cantidad de agua guarda, 8,51 hectómetros cúbicos, y se encuentra al 38% dde su capacidad y el de Casasola, con 9,34 hectómetros, no llega tampoco a la mitad de su capacidad y se queda en el 43%.

El que tiene mejor situación y el único que ha ganado reservas esta semana, además del embalse del Conde de Guadalhorce, ha sido el embalse de la Concepción. Acumula 44,18 hectómetros cúbicos, tres más que la pasada semana, y está casi al 77% de su capacidad. Con respecto al pasado año, este embalse de la zona occidental de la provincia recoge 20 hectómetros más. 

Por el momento, las previsiones meteorológicas no traen para los próximos días precipitaciones significativas que vayan a aliviar la situación de falta de agua en el campo ni mejorar las reservas en los pantanos. Lo que sí viene este miércoles en otro episodio de calima, de polvo en suspensión, que provocará que la atmósfera se enturbie, que la visibilidad sea más reducida y que se tenga peor calidad de aire.

La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) no descarta que se produzcan leves precipitaciones en el extremo occidental de la provincia, aunque serán “débiles” y “poco importantes”, según señala el director del Centro Meteorológico de Málaga, Jesús Riesco. En Málaga capital, no se esperan lluvias en toda la semana, aunque el domingo podría llegar algo de inestabilidad y la probabilidad de chubascos sube al 40%.