Los partidos se ponen de perfil ante el 'abuso político' en las mancomunidades

Los cuatro principales partidos políticos de la provincia evitaron ayer ofrecer un posicionamiento claro sobre el gasto político que conllevan las dos mancomunidadades malagueñas -occidental y oriental-. Metidos de lleno en la campaña electoral del 26-J, Partido Popular e Izquierda Unida dieron la callada por respuesta al millón y medio de euros que cuesta mantener la estructura política de ambos organismos y la de sus empresas de aguas. El PSOE, por su parte, hizo una defensa en forma de ataque, como si lo que se estuviera planteando fuera la eliminación de estos organismos, aunque sí que llegó a reconocer la necesidad de reducir ciertas administraciones y abrir un debate en torno a este tipo de entes. Y Ciudadanos recordó que siempre han denunciado que muchas administraciones están infladas de cargos de confianza y que ellos precisamente apuestan por adelgazarlas y eliminar gastos superfluos.

Ayer fueron varias las ocasiones en las que este periódico trató de obtener una valoración de PP e IU respecto a la información publicada por este periódico durante el fin de semana sobre estos dos entes provinciales. Sin embargo, al cierre de esta edición, ninguna de las dos formaciones había ofrecido declaración alguna. Y ello a pesar de sobre todo los populares se reparten gran parte de la tarta de la Mancomunidad Occidental y su empresa de aguas -Acosol-, con un gasto en políticos cercano a los 1,2 millones de euros.

Miguel Ángel Heredia, secretario general del PSOE en Málaga, aseguró durante un acto de campaña en Marbella, que "de cara al futuro y a la transparencia tenemos que buscar elementos que reduzcan determinadas instituciones, que las adaptemos a los nuevos tiempos políticos". Pero de ahí pasó al ataque-defensa preguntándose si habría que eliminar el Banco de España "pagando a un presidente 170.000 euros al año, cuando lo único que reivindica es que hay que recortar más los salarios en este país y facilitar el despido". En ninguna de las informaciones recogidas por Málaga Hoy el pasado domingo y ayer se cuestionaba el trabajo que realizan ni los servicios que prestan a los ciudadanos estos organismos provinciales de unión de municipios; únicamente se aludía al gasto en políticos que conllevan, en su mayoría para concejales que están en la oposición en sus respectivos ayuntamientos.

"La mancomunidad hace un trabajo extraordinario, es un elemento de coordinación entre ayuntamientos para dar servicio a los ciudadanos. Aquí hay dos elementos: hay unos que defienden la privatización de todos los servicios, que hagan negocio y les suban los impuestos a los ciudadanos, y hay otros que defendemos el mantenimiento y el fortalecimiento de los servicios públicos. Y las mancomunidades en muchos sitios son esenciales", concretó Heredia.

Ante la insistencia en las preguntas de este periódico, el socialista aseguro: "Vuelvo a repetir que es una institución sobre la que habría que abrir un nuevo tiempo, hacer un nuevo análisis y eso habrá que meditarlo y reflexionarlo bien. Pero también cuando se piensa en el tema de determinadas instituciones siempre se piensa en los políticos y se piensa poco en otro tipo de instituciones donde hay mucha gente que ganan sueldos terribles".

Desde C's, Teresa Pardo, subdelegada territorial institucional en Ciudadanos Málaga, insistió en que su formación siempre ha puesto de manifiesto que "muchas administraciones están infladas de cargos de confianza". Y en que se llega a esta situación "porque tanto PP, PSOE como IU se han dedicado a recolocar a afines durante muchos años". Pardo recordó que la apuesta de la formación naranja pasa por "adelgazar la administración en general y eliminar gasto superfluo para dedicar esas partidas a inversiones que redunden en la mejora de la calidad de vida de los ciudadanos". Aunque también quiso dejar claro "que no se trata de despedir a ningún trabajador".

Las Mancomunidades Occidental y Oriental de la provincia -junto a sus empresas de agua, Acosol y Axaragua- emplean de forma directa a más de 20 políticos, entre los que se encuentran 4 alcaldes y 14 concejales malagueños; además de otros tantos cargos orgánicos de los partidos. Mantener su estructura política le cuesta a los ciudadanos más de un millón y medio de euros al año, porque en total son 85 los políticos que acaban percibiendo alguna cantidad económica a cuenta de estos entes. Ochenta de ellos como vocales de las asambleas de las mancomunidades y los otros cinco contratados como cargos de confianza.