Una persona resulta herida por arma de fuego en la barriada de El Palo
El hombre que fue tiroteado el martes en Marbella falleció ayer después de haber permanecido dos días en coma profundo
Una persona resultó ayer herida por impacto de bala de una escopeta en la barriada del El Palo, según informaron fuentes de la Policía Nacional. El suceso se produjo sobre las 19:10, cuando un particular llamó al Servicio de Emergencias 112 Andalucía, avisando de que una persona se encontraba herida en la plaza Arroyo, en la zona de Las Cuevas del citado barrio, según precisaron fuentes del 112. Hasta el lugar de los hechos se desplazaron agentes de la Policía Local, del Cuerpo Nacional de Policía y servicios sanitarios, que trasladaron al herido al hospital Carlos Haya. Fuentes del centro sanitario afirmaron que el herido, de unos 20 de edad, no corría peligro. Al cierre de este periódico se encontraba estable pero pendiente de evolución. La Policía ha abierto una investigación para esclarecer las causas del tiroteo.
Por otro lado, a primera hora de la madrugada del jueves, el hombre de mediana edad que recibió tres disparos en la zona de la Atalaya del Río Verde, en Marbella, falleció tras algo más de 24 horas en estado de coma profundo. La situación era muy grave a última hora de la tarde-noche de ayer. El extranjero, que según fuentes de la investigación es de nacionalidad francesa, estuvo en coma profundo desde que entrara en el Hospital Comarcal Costa del Sol, a donde llegó trasladado por los servicios de emergencias desde la calle Pablo Picasso, donde sucedieron los hechos el pasado martes.
El pasado 14 de diciembre, sobre las 20:15, un particular daba aviso al centro de coordinación de emergencias 112 tras escuchar varios disparos, cinco al parecer. Al lugar llegaron efectivos tanto de la Policía Nacional (que se hizo cargo de la investigación), Local como sanitarios. El móvil que baraja la policía como causa de los hechos es un ajuste de cuentas, previsiblemente por un asunto de drogas. "Es el motor de estos negocios, y conlleva además coacciones, chantajes, blanqueo, etc.", apuntaron las fuentes consultadas. Pero la investigación avanza a paso lento. El hecho de que apenas se sepa de la víctima que es un ciudadano francés tampoco facilita el proceso. "Una vez tengamos sus datos, podremos proceder a averiguar por dónde se movía, con quién…", relataron las fuentes consultadas por este periódico. Algo que conlleva que no se tengan demasiadas pistas sobre el presunto agresor o agresores. "Es un tipo de investigación que avanza muy lenta".
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