Premios Malagueños de Hoy 2025: compromiso y talento inspirador

Las noticias feas suelen copar los titulares del día a día. Guerras, tiroteos, agresiones, asesinatos machistas, la subida de los precios, el problema de la vivienda, la crispación política... Entre tanta desazón, a veces cuesta encontrar historias positivas, de personas que con su talento y compromiso contribuyen a hacer de esta una provincia mejor. Son oasis en el desierto, a los que a menudo la velocidad de la actualidad no permite enfocar. Para prestarles la atención que merecen, la redacción de este periódico entrega cada año los Premios Malagueños de Hoy, que una vez más vuelven a poner el foco en quienes han sabido convertir su trabajo en ejemplo, personas que de una u otra forma, sirven de inspiración a otros, en ámbitos como el deporte, la arquitectura, la gastronomía, la divulgación y emprendimiento digital, y la política. Así, en su XXI edición estos galardones han distinguido a Salvador Moreno Peralta, Ibon Navarro, Benito Gómez, María González Durán y Elías Bendodo.

Durante la gala, celebrada el martes 2 de diciembre en el Museo del Automóvil y la Moda bajo el patrocinio de la Fundación Unicaja, se reconocieron los logros cosechados por todos ellos. El evento contó con una amplia representación de la sociedad malagueña en calidad de invitados y testigos de excepción. Los encargados de conducir el acto fueron el director de Málaga Hoy, Antonio Méndez, y los los periodistas de este periódico Jorge Pedrosa e Irene Martín Morales, quienes hicieron un repaso de las acciones más destacadas de los galardonados.

El primero de los premiados en subir al escenario fue Elías Bendodo, un político de larga trayectoria en la escena municipal, autonómica y nacional al que se reconoce por su compromiso por impulsar, durante su etapa como presidente de la Diputación Provincial, el ansiado proyecto del Caminito del Rey, el mayor éxito del turismo de interior y del que este año se cumple una década. “Cuando llegamos a la Diputación en 2011 todo el mundo decía que el proyecto era muy ambicioso, tanto que era imposible de acometer. Creo que ese fue el detonante para que fuera posible”, expuso, porque “nos pusimos manos a la obra, a hablar, a negociar, a ceder”. Por eso, consideró que el Caminito del Rey “es un sentimiento, la demostración de que si nos planteamos cualquier cosa podemos conseguirlo”.

Tras la política, la revolución digital del aprendizaje de idiomas, que en este caso tiene acento malagueño gracias a María González Durán, más conocida en redes como María Speaks English, y a Sergio Jiménez Ramos, su pareja y socio fundador de la academia online Pikingli. Reconocidos por la prestigiosa revista Forbes entre los jóvenes hispanohablantes más influyentes del mundo, han logrado convertir una startup de idiomas en un proyecto que está cambiando cómo se aprende en España el inglés. “Mi historia empezó aquellas tardes en las que mi madre me ponía canciones en inglés y yo sentía una curiosidad enorme por saber qué decían; y cuando con 11 años me abrí una cuenta de Youtube para traducir letras de canciones”, reflexionó, al tiempo que animó a los jóvenes a “hacer cosas”.

Le siguió Ibon Navarro, el hombre que cambió la historia del Unicaja. En 2022, cuando el club nadaba en la mediocridad, su llegada al banquillo supuso un punto de inflexión. Casi cuatro años después hay siete títulos más en las vitrinas de Los Guindos: dos Copas del Rey, dos Basketball Champions League, dos Copas Intercontinentales y una Supercopa evan la rúbrica del entrenador vasco. “Es bonito y estoy muy orgulloso”, afirmó el técnico, que insistió en que “yo soy parte de ese grupo de personas que hemos cambiado mucho la energía del baloncesto en Málaga, pero no me siento ni el único responsable ni el único protagonista”. Aludió a una labor del club, el staff y los jugadores “que han renunciado al yo por el nosotros”.

Y del deporte a la gastronomía, con Benito Gómez, chef con dos estrellas Michelin con su restaurante Bardal. Cocinero forjado entre la vocación y la obsesión por aprender, en numerosas ocasiones ha contado que no fue, ni mucho menos, el mejor de los estudiantes en la escuela de hostelería. Nació en Barcelona, pero Ronda se convirtió en su casa y en el escenario desde el que ha construido una de las trayectorias más destacadas de la cocina nacional. Dedicó el galardón a su familia de Bardal y Tragatá porque “yo soy el que pone la cara, pero el trabajo lo hace el equipo”. Y dejó un mensaje: “Hay que trabajar, esforzarse, luchar y conseguir los sueños. No puede ser todo regalado, el sacrificio es muy bonito y luchar por algo que quieres es fantástico, ir consiguiendo objetivos y ser ambicioso es lo mejor. La vida al final es vivir experiencias”.

La gala cerró con el premio a una figura imprescindible para entender la arquitectura y el urbanismo en Málaga: Salvador Moreno Peralta. “Con la edad he aprendido a valorar de los galardones no tanto los méritos de a quien se le da, sino el cariño de quien lo concede; y en este caso es lo que más me gusta”, afirmó. Agradeció “a toda esa gente que me ha estado soportando estos 54 años de trabajo” y antes de concluir hizo un guiño a su hijo, Pablo Alborán, quien hace una década ya recibió el Premio Malagueños de Hoy, recitando su famosa canción Solamente tú.

El evento contó con la presencia del presidente de la Diputación, Francisco Salado; el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, y la delegada de la Junta de Andalucía, Patricia Navarro, entre otros alcaldes de la provincia. Todos ellos tuvieron claro qué le pedirían en nombre de Málaga al año que está a punto de comenzar. Asuntos como la vivienda, la movilidad, el agua, la seguridad y la educación centraron sus deseos.

Salado hizo un balance positivo del presente año, valorando que la provincia sigue con su “pulso de crecimiento económico y de empleo” y que el turismo crece “no solo en cantidad, sino también en calidad”. Así, al 2026 le pidió seguir por la senda de generación de empleo y de riqueza, pero también reclamó “que los déficits que hemos tenido durante 2025, y que se están convirtiendo en endémicos, se puedan ir corrigiendo” o, si no, al menos “orientando” sus soluciones. Se refirió, especialmente, a la movilidad, su gran caballo de batalla y pidió “tomárselo más en serio”. “Hay que tener un compromiso ya firme de las administraciones competentes”, declaró. En su lista de deseos, Salado también anotó la vivienda, otro “gran problema” que instó a resolver “para las generaciones presentes y futuras”. “Hay que ponerse las pilas”, concluyó.

De la Torre tampoco olvidó el problema habitacional, y confió en “que seamos capaces entre todos de producir más viviendas”. Más “asequibles” y “libres”, precisó, tanto en alquiler como en venta. “Tener suelo finalista rápido, eso le pido al próximo año”, afirmó el alcalde, quien también quiso poner en valor la importancia de la educación. Consideró que hay que situarla “como centro fundamental” de todas las cosas. A su juicio, mejorar el nivel educativo de la sociedad es tarea de todos, “familias, profesores y también las propias administraciones que tienen que plantearse elevar el nivel educativo de nuestro país”. “Me refiero al nivel de nuestra enseñanza en general, para que el informe PISA nos coloque como los primeros países de Europa”, expuso el alcalde, que sostuvo que “nos jugamos mucho en ello”.

Por su parte, Navarro pidió salud al próximo año y aprovechó para defender el trabajo del Gobierno andaluz en este ámbito para “intentar revertir todo lo que a lo largo del tiempo se ha ido degradando”. Así, insistió en que “tenemos un gran sistema sanitario y hay que ponerlo en valor”. Pero dijo que “Málaga necesita mucho más” y reclamó “que todas las administraciones arrimen el hombro en esos proyectos que faltan para que podamos seguir creciendo”.