Salud adelanta un mes en Málaga la vigilancia de los mosquitos portadores del virus del Nilo occidental

La Consejería de Salud y Consumo de la Junta de Andalucía ha iniciado ya en mayo la vigilancia de los mosquitos vectores del virus del Nilo occidental (VNO) en Málaga y toda la comunidad autónoma. Esto supone un mes antes que en 2024 y dos respecto a 2023. La anticipación se debe a la coincidencia de lluvias y calor, condiciones que favorecen la proliferación de estos insectos. Los controles consisten en colocar trampas y buscar el virus por PCR. En la provincia se han puesto 20 trampas, localizadas en municipios de riesgo alto y algunas en riesgo medio.

Las novedades están recogidas en el Programa de Vigilancia y Control Integral de Vectores de la Fiebre del Nilo Occidental para esta temporada puesto, según explica la Administración sanitaria, que "las condiciones ambientales de Andalucía hacen que los mosquitos del género culex puedan pervivir casi todo el año, aunque la probabilidad de circulación del virus es mayor desde junio a octubre".

En la provincia de Málaga hay nueve municipios en riesgo alto de transmisión del virus (Alhaurín de la Torre, Alhaurín el Grande, Almargen, Antequera, Cártama, Coín, Guaro, Málaga capital y Pizarra), 66 en nivel medio y 28 con rango bajo. El primer caso en humanos se detectó en noviembre de 2024, en Guaro.

Según indicó la Consejería, este año, se ha ampliado el número de trampas instaladas de 27 a 120 en la región y se han instalado en todas las provincias dado que el pasado año se pudo comprobar que el virus se ha expandido hacia otras provincias. Habitualmente se concentraba en Cádiz, Huelva y Sevilla. Pero las especies de los mosquitos transmisores están ya en todo el territorio andaluz. Salud apuntó que los municipios con nivel alto se han incluido en esta vigilancia y que las trampas se han colocado allí donde puede esperarse una extensión del VNO.

Además, conforme al programa autonómico, la detección de circulación del virus en mosquitos a menos de 1,5 kilómetros de una población supondrá la declaración de esta área en alerta. Este año, todos los municipios andaluces están catalogados en un nivel de riesgo. En marzo pasado, Salud ya comunicó ese rango a los ayuntamientos, fuera bajo, medio o alto. La Consejería detalló que la confirmación de la presencia del virus en una población, sea en mosquitos, caballos o en un caso en humano, conllevará la declaración del área en alerta, una situación temporal de la que el municipio saldrá cuando, durante cuatro semanas consecutivas no se detecte nueva circulación del VNO en mosquitos o nuevos casos en humanos.

Para el control y vigilancia de las trampas, la Consejería de Salud y Consumo ha movilizado a 400 agentes de Salud Pública de todo el territorio de la comunidad autónoma. Desde abril, estos están ayudando a los ayuntamientos a elaborar sus Planes Municipales de protección frente al VNO. "Esto supone un gran esfuerzo por parte de los Distritos de Atención Primaria al implicar a aproximadamente la mitad de la plantilla en estas tareas", ha destacado la Administración sanitaria.

La infección por el VNO es una zoonosis transmitida por mosquitos del género culex. Se transmite entre las aves a través de la picadura de mosquitos infectados siendo éste su ciclo natural. Los humanos y otros mamíferos pueden infectarse de forma colateral, sin que desde ellos se produzcan nuevas transmisiones. Alrededor del 80% de las infecciones por el VNO en humanos son asintomáticas. La fiebre del Nilo Occidental (FNO) es la presentación clínica más común. Los ancianos y las personas inmunovulnerables corren un mayor riesgo de desarrollar la enfermedad neuroinvasiva.

Municipios de Málaga y nivel de riesgo

Nueve municipios de la provincia están catalogados como nivel de riesgo alto. Estos son: Alhaurín de la Torre, Alhaurín el Grande, Almargen, Antequera, Cártama, Coín, Guaro, Málaga capital y Pizarra.

La mayoría del territorio provincial se encuentra en rango medio. Exactamente son las siguientes 66 localidades: Alameda, Alcaucín, Algarrobo, Algatocín, Almáchar, Almogía, Álora, Alozaina, Árchez, Archidona, Ardales, Arenas, Arriate, Benahavís, Benalauría, Benalmádena, Benamargosa, Benamocarra, Benarrabá, Campillos, Canillas de Albaida, Cañete la Real, Carratraca, Casabermeja, Casarabonela, Casares, Colmenar, Comares, Cuevas Bajas, Cuevas de San Marcos, Cútar, El Borge, Estepona, Frigiliana, Fuengirola, Fuente de Piedra, Gaucín, Humilladero, Iznate, Macharaviaya, Manilva, Marbella, Mijas, Moclinejo, Mollina, Monda, Montecorto, Nerja, Ojén, Periana, Rincón de la Victoria, Riogordo, Salares, Sayalonga, Sierra de Yeguas, Teba, Torremolinos, Torrox, Totalán, Valle de Abdalajís, Vélez-Málaga, Villanueva de Algaidas, Villanueva de la Concepción, Villanueva de Tapia, Villanueva del Trabuco y Viñuela.

En riesgo bajo se encuentran 28 localidades malagueñas. A saber: Alfarnate, Alfarnatejo, Alpandeire, Atajate, Benadalid, Benaoján, Canillas de Aceituno, Cartajima, Cómpeta, Cortes de la Frontera, Cuevas del Becerro, El Burgo, Faraján, Genalguacil, Igualeja, Istán, Jimera de Líbar, Jubrique, Júzcar, Montejaque, Parauta, Pujerra, Ronda, Sedella, Serrato, Tolox, Villanueva del Rosario y Yunquera.

Recomendaciones para los ciudadanos

Aparte de las medidas que lleve a cabo la Administración, también los ciudadanos pueden hacer mucho para la prevención. Salud destaca que, sobre todo, aquellos que viven en zonas de alto riesgo "tienen un papel fundamental". De dos maneras. Por un lado, eliminando todos aquellos sitios donde el mosquito pueda poner sus larvas y propagarse. Por otro, tomando medidas para protegerse de las picaduras o reconocer los síntomas del virus para consultar a su médico de cabecera.

La Dirección General de Salud Pública y Ordenación Farmacéutica recomienda usar repelentes de mosquitos, cubrir la mayor parte del cuerpo con ropa clara, evitar los olores intensos de perfumes o jabones aromatizados porque los atraen y no salir al amanecer y al atardecer, que son los momentos de máxima actividad de estos insectos. Asimismo, Salud aconseja reforzar las medidas domésticas como instalar mosquiteras, usar insecticidas o apagar las luces si no son necesarias porque los atraen.

Las autoridades sanitarias insisten en la importancia de evitar que haya zonas de agua estancada donde los mosquitos crían sus larvas. Por ello, Salud recomienda mantener adecuadamente albercas, piscinas y lavaderos y vaciar el agua que pueda acumularse o pasar desapercibida en jardines, macetas, juguetes o cubos. En el caso de explotaciones ganaderas, aconseja renovar con frecuencia los bebederos de los animales, evitar el agua de charcos en rodadas de vehículos o caminos, fugas de agua por grifos o conducciones rotas, abrevaderos con fugas o con poca renovación.