Los trabajadores tuvieron 60 accidentes laborales al día en el primer semestre

Los trabajadores sufrieron en el primer semestre del año 10.695 accidentes laborales -en su puesto o in itinere- en la provincia de Málaga, lo que supuso un aumento del 8,2% respecto al mismo periodo del año anterior y una media de 60 diarios. Crecieron de forma notable los accidentes leves, aunque la buena noticia es que hubo menos fallecidos, según los datos de la Junta de Andalucía facilitados ayer por el sindicato Comisiones Obreras.

El gobierno autonómico ofrece dos tipos de estadística. En primer lugar están los accidentes que provocan baja laboral en el propio centro de trabajo y que son los más numerosos. En este caso se contabilizaron 8.890 en el primer semestre del año, un 7% más que en el mismo periodo de 2017. La mayoría de accidentes se produjeron en el sector servicios -6019, el 67% del total-, algo lógico teniendo en cuenta que representa en torno al 80% del PIB. No obstante, lo más llamativo es que los accidentes se dispararon un 32% en la construcción, fruto de una mayor actividad, pasando de 1.320 a 1.743. En la industria y en la agricultura también ha habido incrementos, aunque menores.

Dentro de los accidentes que causan baja están los leves, los graves y los mortales. Los más comunes son los leves, que representaron el 98% del total. Subieron un 7% respecto al primer semestre de 2017 con especial incidencia en la construcción, donde aumentaron un 34%. Por otra parte se contabilizaron entre enero y junio 117 accidentes laborales graves en la provincia de Málaga en el puesto de trabajo, un 6% más. Ese incremento se sustentó en que los accidentes graves en el sector servicios se elevaron un 37%, pasando de 57 a 78, ya que sí hubo fuertes descensos en la agricultura, la construcción y la industria. Los accidentes mortales son, lógicamente, los peores y los que activan más alarmas en las empresas, en la Inspección de Trabajo y en los sindicatos. En su propio centro de trabajo han fallecido en el primer semestre seis personas, dos menos que entre enero y junio de 2017. Tres de esas muertes tuvieron lugar en empresas del sector servicios, mientras que las otras se repartieron a partes iguales entre el campo, la industria y la obra.

Por otra parte están los accidentes in itinere, es decir, los sufridos por el trabajador durante el desplazamiento hacia o desde el lugar de trabajo. Entre enero y junio hubo 1.805 de este tipo, un 13% más. El mayor crecimiento se produjo entre los empleados de la construcción, un 33% más. En estos accidentes hubo que lamentar una víctima mortal, la mitad que en el mismo periodo del año pasado.

La siniestralidad laboral es uno de los aspectos en los que más inciden los sindicatos. El secretario de Salud Laboral de CCOO en Málaga, José Martín, achacó el aumento de accidentes a que cada vez se tira más de empresas subcontratadas y denunció que hay accidentes que las empresas y las mutuas no denuncian "con el único ánimo de reducir sus datos de siniestralidad para de este forma obtener el bono del Gobierno que premia la seguridad en las empresas".