Uno de cada tres vecinos ya es moroso en su comunidad

La morosidad en las comunidades de vecinos está alcanzando volúmenes más que preocupantes y se estima que ya afecta a uno de cada tres vecinos en la provincia. La situación es más dramática en la costa que en la capital por la proliferación de extranjeros y porque hay urbanizaciones donde las promotoras se han quedado con la mayoría de las viviendas y muchas de éstas se han declarado en concurso de acreedores, dejando al cargo de todos los gastos a los escasos inquilinos que compraron su inmueble.

Un informe elaborado por el Programa de Lucha contra la Morosidad en Comunidades de Propietarios, una organización impulsada por el Colegio Profesional de Administradores de Fincas de Madrid, señala que la morosidad vecinal se ha incrementado en un 33,6% en Andalucía en el año 2011 y que Málaga, con una deuda de 61 millones de euros, lidera este particular ranking, seguida de Sevilla (47 millones), Cádiz (43 millones) y Granada (36 millones).

Fernando Pastor, administrador de fincas en Málaga, reconoce que la situación actual en las comunidades "es muy difícil y, especialmente, desde Benalmádena hasta Cádiz es tremendo". Este experto subraya que hay urbanizaciones en la costa donde las promotoras no han podido comercializar el 80% de las viviendas y locales y, al entrar en concurso de acreedores, aplazan el pago mensual de la comunidad, por lo que se tienen que aprobar continuamente derramas extraordinarias para el resto de vecinos, ahogándolos económicamente para mantener las zonas verdes o la piscina. A eso se le suma que muchos de los inmuebles han sido vendidos a extranjeros que mantienen cerrado el piso durante buena parte del año, no abonan sus cuotas y son difíciles de encontrar.

Las reclamaciones judiciales por impago se han disparado, multiplicándose incluso por cinco, aunque los procesos son muy lentos y hay que esperar años hasta obtener resoluciones. Los administradores de fincas reclaman al Gobierno que se cambie la ley de Propiedad Horizontal para que la deuda con comunidades de vecinos sea preferente, es decir, que si a un vecino le embargan y subastan el piso, la comunidad sea una de las primeras en cobrar la deuda junto con el banco. Y lo mismo con las promotoras que entran en concurso de acreedores.

En primera residencia la mora también está creciendo a pasos agigantados por el aumento del paro y la crisis económica. Sin embargo, y pese a que siempre hay morosos profesionales, la tendencia habitual es que los vecinos que no pueden hacer frente a los recibos durante un periodo determinado intenten dar algo a cambio hasta que se resuelva su situación. Pastor explica, por ejemplo, que desde hace seis meses es cada vez más frecuente ver en las reuniones de comunidad a vecinos que se ofrecen para limpiar los bloques o cuidar el jardín. "Aquellos que tienen realmente voluntad de pagar pero que no pueden hacerlo por cualquier motivo están proponiendo despedir a la empresa de limpieza o al jardinero para hacer ellos los trabajos y así compensar su deuda con la comunidad. Se está volviendo al trueque", señala este administrador.

Resulta muy complicado cuadrar las cuentas de las comunidades. Si aumenta el número de morosos la carga económica cae sobre los demás vecinos y eso está provocando un aumento de la tensión en las reuniones de comunidad. Afortunadamente no se suele llegar a las manos, pero la crispación está ahí. Al principio los vecinos suelen ser solidarios unos con otros pero en cuanto pasan unos meses y la situación no cambia, la amistad empieza a quedar en un segundo plano. "Está habiendo mucho conflicto y en las reuniones se está proponiendo que los deudores no puedan entrar en la piscina o en la pista de pádel, pero eso no se puede hacer porque no se puede impedir a un propietario que disfrute de su propiedad. La verdad es que el tema de la morosidad está afectando mucho", indica Pastor.

El informe del Programa de Lucha contra la Morosidad asegura que en el primer trimestre de 2012 la situación está empeorando y "no tenemos ningún indicio que permita anticipar el cambio de tendencia". En toda España los morosos deben 1.350 millones de euros, un 31,2% más, y se estima que en 2012 se alcanzarán los 1.600 millones de euros. Andalucía, con 295 millones de euros, es la segunda comunidad autónoma con mayor deuda de los vecinos, siendo solo superada por Madrid con 375 millones de euros. Se espera, por tanto, que esos 61 millones de euros detectados en Málaga en 2011 se queden cortos respecto a la mora que se pueda contabilizar este mismo año. El periodo medio de cobro por parte de las comunidades, además, está en una media de 141 días y ha descendido bastante el número de conflictos que se resuelven de forma amistosa y extrajudicial.

Hay cuatro tipos distintos de morosos. El estudio mencionado señala que en Andalucía el 35% son morosos selectivos, es decir, personas que no pueden pagar todas sus facturas y priorizan unas sobre otras, dejando en el cajón la de la comunidad de vecinos hasta que mejore la situación. Un 29% son personas realmente insolventes y no pueden pagar nada, por mucho interés o deseo que le pongan. Un 22% son los considerados morosos profesionales, ciudadanos que ponen todo tipo de excusas para pagar la comunidad aunque realmente tienen capacidad económica para hacerlo. El 14% restante corresponde a promotoras que no pagan porque han quebrado o están en concurso de acreedores y entidades financieras que no hacen frente a sus pagos hasta que decidan qué hacer con los inmuebles.