Decía Brandon Thomas que el Amorebieta "es ahora mismo rival directo", que hay que "morir" allí. No le falta ni un punto de razón al delantero del Málaga. La mala racha de resultados obliga al equipo de Natxo González a estudiar el calendario que queda para llegar a la parada 42 de LaLiga SmartBank. Los blanquiazules tienen que conseguir triunfos de calidad ante sus rivales más directos.

El Málaga se enfrentará al cuadro vasco este domingo (18:15 horas) en Lezama, luego recibirá a la Ponferradina en La Rosaleda y después se las verá con el Fuenlabrada en tierras madrileñas. Las dos salidas son fundamentales para intentar que los equipos que están en descenso no tomen aire y se acerquen peligrosamente a los malacitanos.

La clasificación deja ver a un Alcorcón desahuciado con 14 puntos sujetando el farolillo rojo, seguidamente, trío de conjuntos igualados a 26 puntos que forman de abajo hacia arriba el Fuenlabrada, el Amorebieta y la Real Sociedad B. Es el corte del descenso a Primera RFEF y el siguiente en aparecer es el Málaga con 33 puntos. 

Con el filial del cuadro donostiarra perdió de manera incontestable por 2-0, dejándose por el camino también el goalverage particular. Es otra de las cuestiones importantes que el Málaga tiene que cuidar porque cualquier detalle puede resultar de vital relevancia. El Amorebieta ya tomó La Rosaleda por 1-2 el pasado 5 de diciembre. Así que para los de Natxo el triunfo tiene valor añadido.

Dos meses antes, con el equipo más entonado, había vencido por 1-0 al Fuenlabrada en casa. El conjunto madrileño, ahora entrenado por Sergio Pellicer, no termina tampoco de arrancar. El Málaga tiene la opción de distanciarse de ambos notablemente o meterse en un jardín del que quizás no sea capaz de salir.

De cualquier manera, también tiene que mirar hacia arriba. El Mirandés también está con 33 puntos y por delante están Sporting (35) y Zaragoza (36). Sin contar al trío de los 37: Leganés, Lugo y Huesca.