Se acerca la jornada 38 de Primera RFEF, pero en el Málaga los sentidos están puestos en el inminente play off de ascenso a Segunda División. Para las eliminatorias, la Federación hace borrón y cuenta nueva con los futbolistas siempre que no sean objeto de sanción en la última cita liguera. En las filas blanquiazules solamente hay dos jugadores apercibidos que son Víctor García y Einar Galilea.

Si alguno de ellos es amonestado contra el Real Madrid Castilla, tendrá que perderse el primer partido del play off. Evidentemente, también le sucederá a cualquier otro jugador que fuese objeto de expulsión. Los demás, llegarán limpios a las eliminatorias.

Víctor García y Einar Galilea, al borde la sanción

Víctor García lleva bastante tiempo en el límite. El lateral izquierdo es uno de los teóricos titulares de Sergio Pellicer y se está sabiendo guardar bien de las tarjetas. Le enseñaron la cuarta en el partido de la jornada 27 en el campo del Atlético Sanluqueño y desde entonces ha esquivado la quinta bala.

Por su parte, Einar Galilea ha visto seis amonestaciones en el curso. La dos primeras fueron en el Málaga-Córdoba de la jornada 11 en La Rosaleda, por lo que fue expulsado por doble amarilla (la segunda en el 89'). Fue discutible. Desde ahí, solamente le han mostrado cuatro, que no son muchas para ser un central. Como en el caso de Víctor García, la que le ponen en la frontera del castigo se la mostraron en el campo del Sanluqueño.

Ahora será Sergio Pellicer el que tenga que tomar una decisión con respecto a estos dos hombres. Con Galilea apenas está contando en el tramo final (Moussa, Murillo y el propio Víctor han jugado de centrales por delante). Con el último resultado cosechado con la pareja Nelson Monte y Juande, lo natural sería que en Madrid tampoco jugase. Víctor es uno de los fijos en el once, pero quizás sea el día para apostar por un Dani Sánchez, que también ha jugado mucho este curso.

¿Cuántas tarjetas acarrean suspensión en el play off?

En el play off de ascenso de Primera RFEF a Segunda División la normativa indica que para que un futbolista sea sancionado por acumulación de amonestaciones, tiene que ver tres tarjetas amarillas. Eso quiere decir, que en el peor de los casos, el castigo llegaría para la vuelta de la segunda ronda.