Boulahroud abre la veda

Se ha dilatado en el tiempo, pero el primer fichaje de la temporada 2018/19 ya está aquí. El Málaga hizo oficial el fichaje del centrocampista de 25 años Badr Boulahroud. El marroquí llegó el jueves por la tarde a la ciudad y ayer pasó a primera hora de la mañana el reconocimiento médico antes de resolverse los últimos flecos pendientes de su fichaje y firmar por las próximas tres temporadas. Viene del FUS Rabat de la Primera División de su país y el conjunto costasoleño desembolsa alrededor de 600.000 euros por su traspaso.

Es una operación cuanto menos arriesgada. El precio es asumible, pero significativo ahora que el club se mueve dentro del mercado de Segunda División, donde el euro se mira al céntimo. Pivote sacrificado con cualidades para la salida de balón, trae la carta de recomendación del ex malaguista Nabil Baha, antiguo pupilo de Juan Ramón Muñiz y ahora segundo entrenador del FUS Rabat. Sus informes han sido determinantes para completar el seguimiento que técnico y secretaría técnica habían estado haciendo del futbolista.

El marroquí ha desempeñado toda su carrera en Rabat. Ha sido internacional con la selección magrebí y, aunque no ha acudido al Mundial de Rusia, sí se proclamó campeón con los suyos de la Copa África de Naciones para jugadores que compiten en el continente.

Esta es la primera piedra del proyecto, aún con mucho por deshacer y reconstruir. La línea a seguir en el mercado no será esta, de igual modo. Prima la experiencia en la categoría y de hecho se esperaba de hecho que la primera incorporación fuera Jesús Gámez. El fuengiroleño tiene un acuerdo muy cercano con el club tras quedar libre del Newcastle, pero la operación de Boulahroud se ha precipitado en estos últimos días. Así las cosas, Juan Ramón Muñiz ya lo tiene en plantilla y está citado para acudir este lunes al primer día de pretemporada con sus nuevos compañeros.

Está por ver cuál es la adaptación del centrocampista al club y al fútbol de Segunda División. En Marruecos se aseguraba que tenía una oferta del Racing Club de Lens francés, pero jugar en España y la relación con Baha han sido el reclamo definitivo. Es su primera incursión en Europa, el club asume el riesgo apoyado en los informes y la experiencia de Muñiz. Con 25 años no hay mucho margen.