Vuelve la incertidumbre al Málaga por el estado físico de un jugador. No es la primera vez y, según informan desde el club, será la tónica. Silencio o explicaciones vagas acerca de cómo se encuentran los futbolistas con problemas físicos que, en teoría, tienen poca cosa o algo que no debe traer mayores complicaciones, pero que sin embargo a la hora de la verdad se pasan las semanas en el dique seco, entrando y saliendo del gimnasio.

Además, no cualquier futbolista. Se trata de casos de jugadores de una importancia capital en los planes de Juan Ramón López Muñiz. Este jueves le ha tocado a Luis Hernández. El defensa madrileño, que ayer se entrenaba con normalidad, hoy pasa al gimnasio. "Trabajo preventivo", se informa desde el club con toda la oficialidad pero sin el más mínimo detalle.

Habrá que ver si llega a tiempo o no Luis Hernández para estar disponible ante el Lugo. Pero la realidad es que el partido sse juega el sábado (La Rosaleda, 20:30) y él está fuera un jueves. Así que toca esperar, lo mismo que con Andrés Prieto, que también estuvo en el gimnasio haciendo "trabajo preventivo". Ningún dato más.

Es una zona bastante concurrida últimamente. Allí sigue recluido Javi Ontiveros, al que la contusión se le ha debido complicar más de la cuenta porque ya se ha perdido dos jornadas y no ha completado un sólo entrenamiento en la semana en curso. Lo mismo sucede con Mamadou Koné. Desafortunadamente, Juankar ni cuenta porque su lesión sí fue grave y la recuperación marcha por otro raíl.

Por lo demás, sesión clásica en el Ciudad de Málaga, donde está completamente integrado Álex Mula y donde también continúa Miguel Torres. Los canterano Keidi Bare e Hicham completaron la sesión con el primer equipo, que comenzó con una pequeña sesión de vídeo.