El Málaga comunicó a medianoche lo que todos esperaban (por cómo se estaban narrando los acontecimientos), pero lo que nadie deseaba. Se hizo oficial la desvinculación de Shinji Okazaki con la entidad blanquiazul. Escueto comunicado del club para anunciar uno de los palos más gordos de la afición, la marcha del bombazo del verano, el primer fichaje malaguista, que generó una ilusión tremenda. El asiático salía cabizbajo de La Rosaleda tras el acuerdo.

Este mercado veraniego marcará un antes y un después en el Málaga. Ya fue preocupante la gestión que se llevó a cabo en el verano de 2018, con la inscripción de varios jugadores sobre la bocina, pero la de éste sobrepasa cualquier barrera. El club anunció el fichaje bomba de Shinji Okazaki el 30 de julio, tras casi una semana en la concentración del equipo en Estepona del nipón. También el la contratación de José Rodríguez, por el que hubo que esperar varios días también para anunciar el 18 de agosto su incorporación. El ok de la propiedad ralentizó todo. Tras algo más de un mes y dos semanas, respectivamente, de la oficialidad de estas operaciones, la entidad encontró imposible la inscripción de ambos ante LaLiga. Junto a ellos, los casos de Álex Mula e Iván Rodríguez. Estos tres últimos, en una situación compleja.

Ridículo mayúsculo en la gestión deportiva. Un jugador de calado internacional, con más de 100 partidos disputados con la absoluta de Japón y una Premier League con el David de la competición, el Leicester City, como es Okazaki, y José Rodríguez, un jugador que apostó por volver al club blanquiazul declinando otras ofertas. La imagen que proyecta el Málaga tanto a jugadores, representantes, otros clubes y su propia afición es preocupante, sobre todo cuando la entidad ha sido un club interesante para futbolistas, destacando su ubicación, la Costa del Sol.

El club ha sido incapaz de reorganizar sus números, sus cuentas, el Salario Liga y lidiar con el límite salarial durante más de un mes, cuando se pactó la llegada del japonés. Desde entonces se han concretado diversas salidas y movimientos pero en ningún momento han sido suficientes para permitir la inscripción de los únicos dos fichajes hasta el momento, principalmente, por sus altos emolumentos. La dirección deportiva ha estudiado diversas vías para que todo encajara pero finalmente se han tomado la decisión de abortar sus inscripciones y encontrarles una solución, o sea, una salida. El peor desenlace esperado.