Málaga C.F.

Algeciras - Málaga CF: Alfonso Herrero sujeta un punto (0-0)

Jokin, Herrero y Genaro en el Algeciras - Málaga CF

Jokin, Herrero y Genaro en el Algeciras - Málaga CF / Carlos Guerrero

El Málaga no rompe fuera de casa. Le está costando un mundo imponer su fútbol más allá de los límites de La Rosaleda. Como ante el Atlético Sanluqueño, en Algeciras se le atragantó el rival, que además de estar muy atento a no dejarse superar, gozó de las mejores ocasiones del partido. Alfonso Herrero impuso sus galones para compensar en su área lo que no se produjo en la otra.

Sabiendo que Córdoba y Castellón cumplieron en sus citas, puede saber a poco el punto, pero no es momento de inmolarse y perder el norte. El Málaga no estaba invitado a la fiesta hace diez partidos y ahora todavía mantiene una llamita viva, aunque el empate deje ese regusto de tren perdido.

Se escuchó en el Nuevo Mirador el “Sí se puede” por parte de los aficionados desplazados, que hicieron de tripas corazón porque en sus cuentas sólo cabía la victoria. En el horizonte dos encuentros en La Rosaleda consecutivos en los que está obligado a sumar los seis puntos y esperar resultados.

Volvió Pellicer a introducir retoques en el once. Sentó a los laterales de la jornada anterior para recuperar a Jokin Gabilondo y Dani Sánchez. También a Ferreiro, que ocupó la plaza de Avilés. Como era previsible, Roberto fue titular, sobre todo con Dioni en casa. Llamó la atención que fuese suplente Dani Lorenzo, pero el marbellí estuvo con fiebre el viernes y prefirió dar espacio a Juanpe.

Al Málaga le costó al principio tomar el control del juego ante un Algeciras impetuoso que tuvo pasado el cuarto de hora la mejor ocasión de la primera mitad. Merchán filtró un balón con el exterior que leyó bien Zequi para plantarse por sorpresa solo ante Alfonso Herrero. El cancerbero malaguista estuvo soberbio, como acostumbra, y resolvió el mano a mano.

Los de Lolo Escobar andaban más pendientes de entorpecer el juego del Málaga, que en ocasiones se jugó la carta del fútbol más directo para tratar de pescar algo ante un Algeciras mermado en el centro de su zaga. Poco a poco fue arrinconando el conjunto de Pellicer a su rival, tejiendo buenas acciones.

Insistía el de Nules en hacer el campo más ancho desde su zona técnica. Lo consiguió en algunas ocasiones, especialmente por las subidas de Dani Sánchez, pero le faltó punch en el área de Lucho, que despejó algún balón peligroso. Probó con conducciones de Larrubia y Ferreiro, que arrancó desde la izquierda. Se acercaba y se acercaba, sin embargo no era capaz de traducirlo en peligro.

Casi aprovecha algún córner y faltas laterales, pero el frontón algecirista cumplía como buenamente podía en cada arreón de los malagueños. No se veía cómodo a Roberto, al que tenían señalado en rojo los defensores del conjunto campogibraltareño. El cordobés sacó un buen disparo de zurda tras una acción elaborada y larga del Málaga.

Juanpe trató de ser un elemento distorsionador entre líneas y combinó alguna buena acción con otras menos afortunadas. Se echaba en falta a Dani Lorenzo, que venía con la bombilla encendida. Aun así, el Málaga lo intentó hasta los márgenes del ecuador del partido. Un córner final botado por Ferreiro fue reclamado con vehemencia por los blanquiazules como mano en el área. El colegiado mandó a todo el mundo a la caseta.

Se retrasó la reanudación por un incidente en la grada. El Algeciras se plantó mejor, dejando los vacíos mínimos para un Málaga, que no volvía a tener problemas para desactivar al rival. Poco a poco el partido recuperó la tónica del primera parte. Roberto pidió un penalti tras una caída en el área y Nelson corrigió un despiste colectivo que pudo costar un gol.

Para entonces Pellicer ya había tirado de Dani Lorenzo, con su dedo roto, para ver si el marbellí iluminaba el Nuevo Mirador. Fue en cambio el Algeciras el que volvió a hurgar en la espalda de la defensa del Málaga. Zequi se coló en el área y la defensa reaccionó bien para abortar el peligro. Poco después Herrero destruyó otro mano a mano, esta vez ante Mario.

Tiró el entrenador de Nules de casi todo lo que tenía a su disposición pero el Algeciras estaba sabiendo leer mejor el contexto en todos los sentidos. Los minutos finales desprendían la angustia de un Málaga con prisas por tratar de firmar un gol que no llegó.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios