Málaga C.F.

Rubén Castro y su batalla con los mitos: iguala a Telmo Zarra y ya ve a Quini

  • El malaguista ya acumula 281 goles entre Primera y Segunda en su trayectoria y se codea con históricos del fútbol español

  • Su actuación ante el Lugo

Rubén Castro, tras asistir a Dani Lorenzo.

Rubén Castro, tras asistir a Dani Lorenzo. / Pepe Gómez

Rubén Castro se encontró en un hábitat más cómodo con la disposición que colocó Pepe Mel en el partido del Málaga ante el Lugo. Dos jugadores de banda y una mejor ocupación de los espacios. El resultado es que el cuarentón canario metió un gol y dio dos asistencias a los canteranos Cristian y Dani Lorenzo para firmar el 3-2.

Hay algo que habla bien de él. Es un goleador nato pero juega para el bien del equipo. En la contra del 3-0 podía haber sido egoísta y apurar. Prefirió darle el gol a Dani Lorenzo. Y es que Rubén está en una misión. Marcó su gol 281 sumando las categorías de oro y plata del fútbol nacional, algo inaudito en el siglo XXI, hay que remontarse a tiempos pretéritos para encontrar a alguien con esas cifras. 

El tanto que marcó bajando el balón el centro de Cristian y definiendo con maestría le permitió igualar al mítico Telmo Zarraonandia. El héroe del 1-0 a Inglaterra en el Mundial de Brasil'50, cuando se ganó a la Pérfida Albión, marcó esa cifra entre Athletic de Bilbao, el club donde es absoluta leyenda, Erandio, Indauchi y Barakaldo. Rubén ya iguala a Zarra.

Por delante, a tres goles, está Enrique Castro, Quini. Pichichi’ histórico español en dicho apartado estadístico, con 284 tantos entre los que metió en el Sporting de Gijón y en el Barcelona. “Tengo dos retos por delante. Hoy he conseguido uno, y me quedan tres o cuatro goles para conseguir el máximo goleador español; espero conseguirlo cuanto antes, sobre todo para que dé puntos al equipo. A nivel personal, estoy muy contento”, decía el canario tras el partido ante el Lugo: "Espero que a partir de ahora la cosa cambie, que empecemos a sumar de tres en tres y no de uno o ninguno. Tenía muchas ganas, al final sufrimos pese a ir 3-0 en el minuto 90, pero lo que importa son los tres puntos, los necesitábamos, y sobre todo por esta gente, que llevaba mucho tiempo sin celebrar una victoria aquí”.

"Hicimos todo lo que nos pedía el míster. Lo que nos vino muy bien es ese gol temprano, para estar un poco más tranquilos. Estuvimos bien, esos dos goles en contra mancharon un poco el resultado, pero lo más importante son los puntos”, continuaba Rubén, que valoraba a la afición: "Como siempre, el público es un espectáculo; que venga tanta gente al estadio a animar al equipo… La verdad es que se lo merecen”. Y el malaguismo, encantado de celebrar sus goles para derribar a los mitos.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios