Bluebay, condenado a pagar 300.000 euros al Málaga CF

Por fin, parece ver la luz del final del túnel una de esas causas judiciales relacionadas con el Málaga CF, que tan enquistadas y paralizadas han estado durante los últimos años. Por desgracia, no es ninguna de las relacionadas con la propiedad, ni con los paquetes accionariales del club de Martiricos, pero sí que es postiva para los de la Costa del Sol.

Según publicó la Cadena Cope Málaga y pudo confirmar este periódico, la empresa hotelera Bluebay, segunda máxima accionista del Málaga CF, ha sido condenada a pagar 250.000 euros por el caso del patrocinio en las camisetas, aunque la entidad de la capital de la provincia recibirá 300.000, puesto que también se incluirá unos 50.000 adicionales en concepto de intereses por la demora de todos estos años en el pago por esa publicidad que se realizó sin recibir ningún pago monetario por ella, hasta ahora. Además, la cantidad se elevará algo más por el IVA, que el club deberá de abonarle a la agencia tributaria española.

Por otro lado, la cadena dedicada al sector del turismo se guarda todavía un as bajo la manga, puesto que la sentencia tiene todavía la opción de ser recurrida en caso de disconformidad por alguna de las partes, así que esto se podrá alargar todavía más e incluso puede llegar a dar un giro de 180 grados, en el caso de que exista ese recurso y que acabe prosperando.

El juicio se iba a realizar en mayo de 2024, pero un cambio de abogados de Bluebay provocó que se retrasase hasta septiembre de ese mismo año, donde estuvieron varias personalidades de la historia reciente del club de Martiricos, como es el caso del administrador judicial, Vicente Casado, exdirector general del club; Roberto Cano, exdirector financiero, o Joaquín Jofre, exresponsable departamento jurídico y de recursos humanos.

El caso viene de 2013 cuando se alcanzó un acuerdo publicitario por dos temporadas a razón de 2,65 millones de euros, que es la cantidad reclamada por la entidad de Martiricos. Sin embargo, la presencia de la cadena hotelera en los soportes de La Rosaleda y en la parte inferior de la zona trasera de la indumentaria blanquiazul solo estuvo durante un año. Todo despareció sin explicación alguna en aquel momento y no se supo nada más hasta que comenzó el embrollo judicial actual y empezaron a circular las distintas versiones.