En la semana que cumple tres años desde su aterrizaje en La Rosaleda, a José María Muñoz le siguen rodeando a cuenta de su desempeño en el Málaga CF. Ahora es el principal responsable de que haya un administrador judicial quien reaparece en escena. La defensa del jeque Al-Thani pide en un escrito a la jueza Ruiz González que les devuelva la gestión. Recientemente Ayuntamiento, BlueBay y Lout Gestion (vinculada a Daniel Pastor) formaron una suerte de alianza para sacarle de algunas de las sociedades NAS que también administra. En el entorno, potenciales compradores andan al acecho paralelamente a estos movimientos.

En el escrito al Juzgado de Instrucción número 14 de Málaga suplica que “acuerde la revocación de la administración judicial impuesta actualmente respecto de las sociedades Málaga Club de Fútbol, Nasir Bin Abdullah & Sons S.L., NAS Spain 2000 S.L. y NAS Football S.L. y la devolución de su gestión”.

Fue también la táctica de Al-Thani en otras ocasiones durante estos años, si bien todos sus escritos y quejas no condujeron a ninguna parte y chocaron con la justicia una y otra vez. Hay que recordar que sobre los Al-Thani –el jeque y sus hijos Nasser, Nayef y Rakan– se admitió una querella por blanqueo de capitales y administración desleal entre otras cuestiones.

De momento, por petición de la Fiscalía, la instrucción debe seguir adelante y Muñoz continuará al menos seis meses más al frente del club. También se solicitó a la jueza que bloquease la contratación del nuevo director general, Kike Pérez. Pero el vitoriano sigue a lo suyo, ajeno a estos asuntos.

Defensa de los Al-Thani

Los Al-Thani se visten de víctima por “el perjuicio que ha supuesto para el club la actuación de la administración judicial. Esta calamitosa situación en que se encuentra el club es consecuencia de la situación provocada por la administración judicial. El administrador judicial carece (y a la vista están los resultados) de la experiencia y conocimientos necesarios para dirigir el día a día de un Club de Fútbol Profesional. Es la mayor crisis deportiva e institucional del Málaga CF con una pésima calificación deportiva (desgraciadamente hoy muy cercana al descenso a liga no profesional), cese de puestos fundamentales (numerosos entrenadores y el director deportivo) y petición de dimisión por parte de la afición el pasado viernes dirigida al administrador judicial”.