Buscan al autor de un segundo tiroteo en 24 horas en Marbella con un herido en una pierna

Poco más de 24 horas han transcurrido desde que en Marbella la Policía Nacional abriera una investigación tras registrarse un incidente con arma de fuego, sin heridos, cuando de nuevo han vuelto a saltar las alarmas. Los agentes, en esta ocasión, han localizado a un hombre de 26 años herido por arma de fuego. Las primeras pesquisas apuntan a que habría recibido un disparo en la tibia, según fuentes próximas al caso. Los agentes descartan que se tratara de un tiro accidental y continúan buscando al autor. Por el momento no se han practicado detenciones, han confirmado desde la Comisaría provincial de Málaga.

Eran las 10 de la noche cuando testigos alertaban al Servicio de Emergencias 112 Andalucía de que habían oído detonaciones en la barriada de Nueva Andalucía. El centro coordinador movilizó un dispositivo en el que activó a la Policía Local, a la Nacional y a los sanitarios. Los avisos requerían que una ambulancia acudiera hasta el lugar para atender a la víctima. Si bien no se conoce, todavía, cuál es la gravedad del impacto, la información que manejan los investigadores es que el herido estaba consciente.

El caso anterior ocurría en la barriada de Las Albarizas, en Marbella, según indicaron entonces fuentes policiales. A la una y media de la tarde, los efectivos se desplazaban en varios vehículos hasta la calle Alfredo Palma, donde comprobaron que no había habido daños personales.

Aunque la investigación estaba en ese momento en una fase incipiente, las primeras pesquisas apuntaban a que los implicados en el tiroteo podrían haber huido del lugar a bordo de un vehículo azul de la marca BMW. La Policía trataba de averiguar el trasfondo del tiroteo, por el que de momento no se han practicado detenciones.

A comienzos de noviembre, otro tiroteo ponía en alerta a Marbella. Un Mercedes avanzaba a toda velocidad por unas de las carreteras que conecta Málaga con Marbella, adelantando a otros vehículos y obligando a conductores a apartarse del camino. Dentro, dos hermanos se dirigían con premura hacia el hospital más cercano. El copiloto sangraba por una herida de bala en la pierna tras haber sido alcanzado por un disparo. Después confesaría que ya sabía que algo iba a ocurrirle. Antes, subrayó, hubo otro aviso, según fuentes conocedoras del caso.

Un Zeta, como se conoce a los radiopatrulla de la Policía Nacional, alertado por la conducción temeraria, había dado el alto al vehículo sospechoso. Al acercarse, los agentes descubrieron que uno de los pasajeros había recibido un disparo en la rodilla. Lo que comenzó como actuación por una infracción de tráfico derivaría en una investigación por un nuevo tiroteo, el enésimo en la Costa del Sol, con un herido, una huida al hospital y un silencio que pesa.