La Policía Local de Marbella ha rescatado a dos caballos sueltos que corrían desbocados por la autovía A-7, en el km 1042, a su paso por el término municipal de dicha localidad malagueña. Los agentes tuvieron que escoltar al animal, que no tenía aparejo, hasta la salida más cercana de la autovía con el objetivo de garantizar la seguridad tanto de los equinos como de los conductores.

Los caballos que se habían escapados de una finca cercana, iban al galope por la citada carretera, cruzando a ambos lados de la autovía cambiando en varias ocasiones el sentido y dirección lo que provocó un colapso total de la carretera en ambos sentidos, dado que era domingo, pasadas las 13:00 horas, plena hora punta para dirigirse a las playas de la Costa del Sol o a los destinos vacacionales de cientos de conductores.

Pero gracias a la actuación de un agente con pericia y experiencia en caballos momento el cuál se encontraba en su puesto de la Sala 092 y al escuchar el comunicado salió inmediatamente de Jefatura hacia el lugar para poder colaborar con los compañeros. Al llegar al lugar comprobó que estos se encontraban interviniendo con los dos animales y fue entonces cuando se procedió a cortar totalmente el tráfico en la autovía. No hubo que lamentar ningún accidente. La Guardia Civil de Tráfico, que tiene la competencia de la vía, se hizo cargo de corregir las posibles infracciones cometidas por los propietarios.

Otros rescates de animales

Hace unos meses, efectivos del Consorcio Provincial de Bomberos (CPB) de la Diputación de Málaga intervinieron para rescatar a un caballo en una finca privada del municipio malagueño de Benaoján.

El animal estaba atrapado tras su caída en una acequia donde sus patas habían quedado atrapadas por una goma de riego. Así, tras las maniobras, el equino fue liberado sin sufrir daños, según han informado desde la Diputación de Málaga.

No es la primera vez que los Bomberos del Consorcio tienen que intervenir para sacar de apuros a algún animal. Muchos recordarán el caso del perro que se cayó por el Tajo de Ronda en 2021, desde una altura de 20 metros. Milagrosamente salvó su vida, gracias a que un zarzal amortiguó la caída.

Efectivos del CPB acudieron al lugar y uno de los bomberos descendió hasta donde se encontraba el animal, que estaba en buen estado, para realizar el rescate y poder subirlo con un arnés.