A disposición judicial el hombre que tiroteó a otro pensando que había matado a su padre en Mijas
La Guardia Civil ha establecido un fuerte dispositivo de seguridad y ha perimetrado la zona para evitar que se produjeran altercados
Investigan si el desaparecido en Mijas murió tras una caída en una alcantarilla cuando huía por un robo de droga
El hombre detenido en Mijas por supuestamente tirotear mortalmente a un vecino que lo creyó culpable de la muerte de su padre, Raúl Heredia, ha sido puesto a disposición judicial este viernes con fuertes medidas de seguridad.
El titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Fuengirola será el encargado de tomarle declaración después de que fuera arrestado el pasado martes por presuntamente matar de dos disparos a Fernando Campos.
La Guardia Civil ha establecido un fuerte dispositivo de seguridad y ha perimetrado la zona para evitar que se produjeran altercados ya que este jueves la familia de la víctima salió a la calle para pedir justicia e intentaron acceder a la vivienda de Raúl Heredia para sacar todos sus enseres y que nadie de su entorno más cercano volviera a la zona.
Una decena de furgonetas de la Guardia Civil y Policía Nacional así como más de una veintena de agentes, algunos con metralleta en mano, han velado por la seguridad y se mantendrán en la zona hasta que el juez tome las medidas oportunas tras la toma de declaración.
El investigado, que ha permanecido estos días en dependencias de la Guardia Civil, ha sido trasladado en coche hasta el juzgado donde en las próximas horas se le tomará declaración.
La Guardia Civil encontró el pasado martes el cuerpo de Raúl Heredia, un hombre de 41 años que desapareció el 24 de julio, en una alcantarilla próxima a su vivienda en la barriada Molino del Viento de Mijas, a unos 200 metros del cañaveral junto al río Fuengirola donde se le vio con vida por última vez.
En el momento de la desaparición Raúl estaba con su primo Fernando, ambos habían salido del barrio caminando juntos, pero -según ha explicado la familia del segundo- al llegar a la zona de las cañas se separaron.
Raúl se fue hacía el río y Fernando, de 57 años y en tratamiento para poner fin a sus problemas con los estupefacientes, se dirigió hacía al centro donde tenía que recoger su dosis diaria de metadona, según mantiene la familia del segundo.
Las cámaras de videovigilancia de un establecimiento cercano grabaron la escena, aunque las imágenes no dejaban claro hacía donde iba cada uno.
La autopsia practicada a Raúl Heredia indica que presenta traumatismos compatibles con una caída y no hay indicios de arma blanca ni agresión de otro tipo, según la Delegación del Gobierno de Andalucía.
Poco tiempo después de su muerte, Fernando recibió dos disparos en la cabeza en la misma puerta de su casa, donde estaba su madre.
Fernando Campos será enterrado este viernes por la mañana en Fuengirola, una vez que el Instituto de Medicina Legal ha permitido el traslado del cuerpo y sus familiares han pedido justicia al tiempo que han lamentado que haya sido asesinado "solo por una sospecha".
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