Aventuras infantiles, España, 2013, 92 min. Dirección: Óscar Santos. Guión: Jorge Lara, Francisco Roncal. Fotografía: Josu Inchaustegui. Música: Fernando Velázquez. Intérpretes: Raúl Rivas, Daniel Cerezo, Javier Gutiérrez, Álex Angulo, Claudia Vega, Marcos Ruiz, Fran García, Javier Cifrián, Christian Mulas, Joseba Apaolaza. Cines: Málaga Nostrum, Vialia, Rosaleda, Plaza Mayor, La Verónica, Alfil, Miramar, Gran Marbella, Plaza del Mar, Rincón de la Victoria, Ronda, El Ingenio.

Nacida con clara vocación exportadora, esta segunda traslación al cine de carne y hueso de las aventuras de Zipi y Zape creadas por el dibujante Escobar para el sello Bruguera, nace ya desde la más absoluta infidelidad y traición al espíritu del original, con unas hechuras de superproducción infantil que borran toda identidad propia (o local) para ponerse al servicio de una fórmula deudora del cine de aventuras hollywoodiense de los años ochenta tipo Exploradores, Goonies, Cuenta conmigo o similares.

Por otro lado, la operación revival se nos antoja de lo más paradójica, ya que a los chavales de hoy nada les dirán las correrías gamberras de los hermanos de Escobar, convertidos aquí en dos repelentes niños pijos de flequillo a la moda, y, si me apuran, mucho menos aún las películas de referencia, de manera que esta Zipi y Zape parece realmente dirigida a alimentar la nostalgia de esos padres treintañeros que sí leyeron los tebeos y vieron las cintas en cuestión, aunque con un lenguaje y un tono definitivamente ñoños e infantilizados que se quedan muy cortos y romos para ellos e irremediablemente anacrónico para sus vástagos.