Ignorante Colau

QUE "la formación es un grado" es un dicho que cabe aplicar tanto a Ada Colau como al Ejército al que la alcaldesa de Barcelona ha desairado esta semana en una feria de la enseñanza en Barcelona. El saber titulado y reciclado es un grado en el Ejército porque, a diferencia de la política, para llegar a tener mando militar hay que haber estudiado, y mucho si hablamos de los mandos medios y altos: ninguno de ellos ha podido ascender sin haber demostrado su valor intelectual de forma continua. A Colau cabe aplicarle lo contrario: para ser la regidora de una de las principales ciudades de Europa sólo hace falta que te voten lo suficiente, aunque no tengas grado alguno. En Wikipedia se puede encontrar su currículum, hecho a mayor gloria -y a duras penas- de la "luchadora y activista" que "realizó estudios superiores de Filosofía de la Universidad de Barcelona, quedando a dos asignaturas de lograr la licenciatura (…) , estudió un curso en Milán con una beca Erasmus". "Qué va, qué va, qué va, ¡yo leo a Kierkegaard!", que dirían Faemino y Cansado. Colau, educativamente, no ha demostrado nada. Con ese currículum casi mejor decir sólo que acabó los estudios de Bachillerato y ensalzar otros méritos. A ver, a ver...: "Participó en diversas movilizaciones, como la que tuvo lugar contra el G-8 en los consulados de Francia y Suiza en Barcelona en el año 2003". Poco más hay. Guau.

Conozco a algunos militares; mi propio padre fue oficial del Ejército del Aire. Tienen estudios equivalentes a una ingeniería, y son sanotes y amables; no exhiben testosterona ni agresividad. Algunos se jugaron la vida en Kosovo o el Golfo, otros han estado en misiones humanitarias o protegiendo a pesqueros españoles de piratas en el Índico. Cuando hay catástrofes, son ellos lo que están: es su obligación. Ingresar en el Ejército es una vía honrada para tener un buen trabajo -a quien le guste y motive tal profesión, claro; no es para mí-; es una carrera dura. Lo militar que produce repelencia a Ada da formación y empleo a miles de españoles. Hay Ejército en todos los países desde que los tiempos más remotos, y es una institución que ha evolucionado con la historia de nuestro país. Cuando Colau dice, humilladora y grosera, a los dos militares en el Salón de la Enseñanza que "el Ayuntamiento prefiere no veros aquí" cabe decir que hace un uso abusivo y personal de su competencia como regidora municipal por tiempo limitado, y que no sólo carece de formación, sino que es un mal ejemplo en este sentido. Y que quizá quien sobraba allí era ella.