Alto y claro
José Antonio Carrizosa
¿Conspiración?
Editorial
EL acercamiento entre Gobierno y oposición en los temas pendientes relativos a la Justicia evidencia que esta segunda legislatura de José Luis Rodríguez Zapatero va a ser muy diferente a la primera. El PP parece dispuesto a ser muy duro con el Ejecutivo cuando sea necesario pero no a romper todos los puentes en aspectos donde es posible que los dos principales partidos españoles alcancen acuerdos importantes para la convivencia nacional. El cambio de registro en lo que se refiere a la lucha contra el terrorismo etarra es la primer señal, pero no la única. El Gobierno va a aprobar en otoño, de acuerdo con el PP, medidas legislativas para implantar en toda España la nueva Oficina Judicial, que pretende reorganizar el trabajo en los juzgados y hacer recaer las tareas administrativas en los secretarios judiciales para que los jueces puedan tener más tiempo en lo que es su profesión: juzgar. Una medida que trata de paliar el colapso tradicional de una gran parte de los juzgados españoles. Además, se propondrá un endurecimiento de las penas para delitos sexuales y la creación de un registro de pederastas, así como una nueva ley de Protección a las Víctimas del Terrorismo, que impida casos como el del sanguinario etarra José Ignacio de Juana Chaos que va a vivir en un piso de San Sebastián muy cercano al lugar donde habitan varias víctimas de ETA. Los dos principales partidos también parecen avanzar seriamente en su intento de alcanzar un acuerdo para la renovación del Consejo General del Poder Judicial y que la solución a un problema que lleva más de dos años de retraso podría plasmarse a finales del próximo mes de septiembre, algo que parecía imposible de alcanzar si observamos lo ocurrido en la pasada legislatura. En definitiva, buenas noticias para la marcha de la Justicia que es lo mismo que decir buenas noticias para el conjunto de los españoles. La oposición tiene como principal objetivo hacer lo posible para desbancar al Gobierno pero también es misión suya colaborar en los avances imprescindibles.
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