Personajes con sabor

Raquel Serrano Lledó: La fuerza de una joven emprendedora

  • Creadora de la férula en 3D para sustituir las incómodas escayolas, almorzamos en el Restaurante Ababor, en Cerrado de Calderón

Juan Luis Pinto, Raquel Serrano y  José Alcaide.

Juan Luis Pinto, Raquel Serrano y José Alcaide. / Paco Menjivar

La mujer que visita hoy nuestra sesión es el Personaje con sabor más joven desde que comenzamos hace más de dos años estos encuentros. Veintinueve años de lucha, constancia y entrega la han llevado a conseguir metas importantes a pesar de su juventud. Y esto no ha hecho más que comenzar.

Raquel Serrano es una chica joven, entusiasta y comprometida con todo lo que le rodea, con la madurez de quien tiene muy claro cuáles son sus objetivos en la vida. Ha sorprendido a propios y extraños con su empuje hasta convertirse en un ejemplo de mujer emprendedora. Hoy la conoceremos un poco más.

El restaurante: Ababor Marisquería

En el conocido y reconocido restaurante Ababor, en Cerrado de Calderón, realizamos esta entrevista. Un lugar frecuentado por nuestra invitada que nos hizo sentirnos como en casa. Aprovechamos además para probar algunos de los nuevos platos que recientemente han incorporado a su ya reconocida carta. A su cocina tradicional mediterránea, especializada en pescados y mariscos, se le suman platos de la casa que merece la pena ser degustados.

Tras la bienvenida por parte de su propietario, Tarek Adil, fuimos atendidos en todo momento por su coordinador y metre, Jose Alcaide, un hombre de esos que conocen su oficio a la perfección. Coordinado en todo momento con Sergio Portero, Luis Martín y Paco Céspedes, sus hombres en los fogones disfrutamos de una experiencia gastronómica de las que no se olvidan. Más adelante les cuento.

La invitada: Raquel Serrano

Da gusto realizar una entrevista a una persona que desprende la vitalidad y la energía de Raquel Serrano, una bocanada de aire fresco en medio de estos tiempos de mediocridad consentida. Un ejemplo de emprendimiento para jóvenes y mayores. Una ingeniera de diseño industrial y desarrollo con un brillante futuro por delante.

¿Cómo se sientes después de tantos reconocimientos? “2019 ha sido un año de locos, pero no se me ha ido la cabeza en ningún momento; un año con mucha presión porque quiero dar la talla en todo momento, hacer bien las cosas, pero me siento muy feliz”. Pero es muy joven y hay que disfrutar de los éxitos. “Yo soy una chica normal, muy constante, eso sí, y nunca me rindo. Aquí el fracaso no se premia, esto no es Estados Unidos, todo lo contrario. Tengo que medir cada paso que doy y evitar cualquier impulso”. Algo que sería muy lógico por la edad en que ha ido desarrollando su carrera.

Juan Luis Pinto Doblas y Raquel Serrano durante el almuerzo. Juan Luis Pinto Doblas y Raquel Serrano durante el almuerzo.

Juan Luis Pinto Doblas y Raquel Serrano durante el almuerzo. / Paco Menjivar

¿Cómo se te ocurrió montar tu propia empresa? [Silencio] Lo hice por pura necesidad, porque no encontraba trabajo. Ahora la situación ha cambiado totalmente. Si yo quiero trabajar en una empresa no tengo problema, sé, que después del camino recorrido no tendría problemas para encontrar trabajo. Pero por encima de todo soy emprendedora, aunque debo reconocer que he emprendido con paracaídas, mis padres siempre han estado ahí, apoyándome. Eso ha sido algo indispensable. He heredado mi manera de ser de mis padres.”

Pero tengo entendido que te equivocaste de carrera. “[Risas] Sí, así fue. Después de cursar dos años de Ingeniera de Montes descubrí que lo que me llenaba de verdad era la creatividad, el diseño y me pase a Industrial. Cometí un error. Lo comenté con mi familia y lo corregí. Me marche a Madrid y allí comenzó todo de nuevo”.

¿Y no ha tenido miedo? “Sí claro, mucho. Muchas veces tengo miedo, si no sería una irresponsable. El miedo siempre está ahí pero me hace ser consciente y muy realista. Me da miedo tener gente a mi cargo. Soy muy perfeccionista y exigente, pero quiero que la gente que trabaja conmigo sea feliz. La combinación es difícil, pero tengo que alcanzar ese equilibrio. Mi trabajo es mi pasión por eso le echo muchas horas. No me arrepiento de nada por lo que he pasado. Gracias a eso estoy aquí”.

Ha revolucionado el mundo de la impresión en 3D con sus ya famosas férulas. “Asistí a un foro de emprendedores en Alhaurín de la Torre, mi pueblo, y lo vi claro. Comencé a ofrecer mis servicios y enseguida me surgieron proyectos. Me compré una impresora 3D y comencé a hacer pulseras y pendientes para amortizarla. Y diseñé una férula que hace la vida más fácil a los pacientes”

¿Cuáles son sus principales ventajas con respecto a la escayola tradicional’ “Su peso, mínimo, el material con el que está hecho, la posibilidad de bañarse con ella, cada una se hace a la medida, al milímetro: mejora la vida al paciente, es ecológica, reduce el tiempo de baja. Muchas ventajas”. ¿Y todo ello hecho en una impresora? Parece increíble. “[Risas] Pues tenemos que acostumbrarnos a ver muchísimas cosas hechas en impresión 3D. Te hablo de puentes, de casas, de todo lo imaginable. La impresión 3D ha llegado para quedarse”.

Cuando la Casa Real tuvo conocimiento de su trabajo le premió con la Medalla al Mérito Civil. ¿Cómo se sintió? “¡Uf! Cuando los Reyes me recibieron fue un momento increíble. Yo estaba muy nerviosa y la Reina me dijo: “estate tranquila porque eres un ejemplo para todas”. Después estuvieron geniales. Se hicieron fotos con toda mi familia. El Rey se mostró familiar y muy cercano. Fue genial”.

¿Su empresa está ubicada en Málaga. Cómo se llama? “Sí, bueno, en Alhaurín. Se llama Fiixit. De momento es un espacio pequeño pero ¡ya verás con el tiempo! Ahora mismo trabajamos tres personas y acabo de incorporar dos más. Ando paso a paso. No se me pueden ir los números de las manos. Las ventas van evolucionando. En España somos tres las empresas que nos dedicamos a esto. Ahora mismo estamos presentes en más de sesenta ortopedias en España donde se distribuyen mis férulas, pero no paramos de crecer. Son muchas las ortopedias que se están sumando a la revolución digital”.

Al margen de reconocimientos, que siempre ayudan, ¿le han apoyado desde la administración? “[Silencio] La administración, la burocracia, frena continuamente la innovación, bueno, me imagino que no solo la innovación. No me daban la licencia para poder trabajar y tuve que hacerlo bajo la de otra empresa. Soy muy cabezota y seguí insistiendo. Da mucha rabia todo eso. Sentí mucho alivio cuando me la concedieron.”

¿Y ahora que todo está en marcha? “Soy totalmente apolítica, solo pido que al emprendedor se le ayude de verdad. Los emprendedores debemos pasar de ser moda a ser prioridad. Me he sentido un número, pero a la vez un plato muy goloso. Soy por encima de todo una mujer emprendedora”. Entonces, si estuviese en su mano, ¿qué cambiaría? “[Silencio] Muchas cosas que suceden en este país. Yo no duraría nada en la política. Soy muy transparente. Premiaría por encima de todo al que hace, al que arriesga, por encima del que lo quiere todo hecho, y hoy en día tiene más premio lo segundo. Lo siento, pero hay que dar más oportunidades a quien lucha. No soporto los que pretenden vivir solo de ayudas. He luchado mucho para estar aquí, por eso me repatea el conformismo”. Pues ahí queda la reivindicación de quien conoce sobradamente el duro camino a recorrer. Y continuamos la interesante conversación mientras disfrutamos de la comida.

Momento gastronómico

Y para no perder el hilo de nuestra entrevista, rápidamente se puso Jose manos a la obra abriendo mesa con una ensaladilla rusa, especialidad de la casa, y uno de los platos de la nueva carta: croquetas de gamba roja de Garrucha, un plato realmente exquisito.

Uno de los platos. Uno de los platos.

Uno de los platos.

Para acompañar estas dos entradas, descorchamos una botella de Martín Codax que maridó a la perfección con estos y los siguientes platos presentados. A pesar de haber cursado una carrera técnica, estás muy vinculada con la medicina. “Claro, yo tengo una visión que el ortopeda no tiene y en lo relativo a lo médico ocurre exactamente al revés. Nos complementamos perfectamente, pero sí, ponemos granito de arena para el bienestar de la sociedad”.

Una empresa requiere de una organización que no se estudia en tu carrera. “No, claro, pero trabajo con objetivos que me marco a corto plazo, poco a poco, para poder alcanzar una carrera de fondo. Me considero una persona muy cuadriculada y así surge la ingeniera que llevo dentro [risas]”. Unas extraordinarias gambas de la bahía de Málaga, cocidas, y unas croquetas de jibia con tinta de calamar fueron los platos que disfrutamos a continuación.

Uno de los platos. Uno de los platos.

Uno de los platos.

Y José nos sorprendió con otro plato de los incorporados a la nueva carta: minihamburguesa de atún rojo de almadraba con mayonesa de wasabi. Sencillamente extraordinario. Una combinación perfecta de sabores y texturas. A parte de la actividad normal de tu empresa, te dedicas a dar conferencias. “Sí, aprendí hace mucho tiempo que lo que no se comunica no existe. Y me lo grabé para siempre. Hay que comunicar, contar, explicar tus proyectos. No hay que tener miedo a que te copien”.

¿Se ves dando conferencias en el extranjero? “ Por qué no? Es posible. Actualmente estoy volcada en España, pero ahí están países como Francia, Italia, Portugal...“. ¿Cuál es tu objetivo más inmediato? “Los próximos tres años voy a estar volcada en Fiixit. Mi objetivo es pasar de 63 ortopedias a cubrir toda España y luego Europa y el salto a EEUU y Sudamérica”.

Uno de los platos. Uno de los platos.

Uno de los platos.

Una fritura de boquerones y salmonetes como antesala a una paella de mariscos acompañada con salsa ali oli, vinieron a maridar con una copa de Jaros tinto, selección de bodegas Lara. Y para cerrar, dos postres de la casa: tarta casera de queso y bizcocho de zanahoria.

Felicidades Ababor y nuestro agradecimiento a todo su equipo de profesionales con Jose Alcaide a la cabeza. Para finalizar le pedí alguna recomendación para los estudiantes de su especialidad. “Que luchen por sus sueños. Le vida les va a poner en situaciones muy difíciles y le va a echar continuos pulsos. Eso es duro pero muy divertido”.

Y con este mensaje de optimismo y superación, como ha sido en sí toda su vida, nos despedimos de una mujer con los pies plantados en la tierra pero que piensa volar muy alto. No la perderemos de vista. Hasta siempre y enhorabuena.

Los vinos

BLANCO: Martín Codax. Vino de la D.O. Rías Baixas mono varietal de uvas albariño. Un vino joven, ácido y fresco. Muy recomendable.

TINTO: Jaros. Extraordinario vino de la D.O. Ribera del Duero mono varietal de uvas tempranillo. Un vino maduro, profundo y complejo que maridó a la perfección con los platos que degustamos.

Patrocinado por: 

Bodegas Lara Bodegas Lara

Bodegas Lara

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios