Un candidato socialista volverá a ocupar el sillón de la Alcaldía de Marbella 24 años después. José Bernal, candidato del PSOE en la localidad, ostentará la vara de mando este sábado tras resolverse la incógnita generada en las dos semanas de reuniones maratonianas mantenidas por las diferentes formaciones políticas, decisión pendiente siempre de la decisión final de Opción Sampedreña (OSP). El Consejo Consultivo de esta formación, integrado por 27 personas, finalmente da luz verde a las negociaciones con los socialistas y se decanta por la opción de conformar un cuatripartito de izquierdas.

La coalición de PSOE, OSP, IU y Costa del Sol Sí Puede (apoyada por Podemos), suman los 14 concejales necesarios para alcanzar la mayoría absoluta, frente a los 13 ediles conseguidos por el Partido Popular. Con ello, el cuatripartito tiene en su mano la posibilidad de desbancar a los populares de una de las principales alcaldías del litoral de la provincia tras ocho años al frente de la misma.

El líder de OSP, Rafael Piña, acompañado por el que sería el nuevo concejal de Hacienda en el Ayuntamiento, Manuel Osorio, y la directora general de Cultura y Patrimonio, Gema Midón, hizo oficial ayer la decisión del Consejo Consultivo tras una reunión de más de tres horas y dos programas de gobierno sobre la mesa. Lo que no quiso precisar es el número de votos obtenido por cada una de las partes.

Sí dejó claro que OSP "no tiene ideología ni de derechas ni de izquierdas, pero estimamos que hacía falta un cambio en la ciudad y por eso hemos llegado a esta decisión". De hecho, las dos palabras más nombradas hasta ahora y durante la reunión del pasado martes entre los 27 miembros del consejo fueron "cambio" y "confianza". Esta última ha sido de gran peso a la hora de tomar la decisión durante estas dos largas semanas, y aunque agregó que "no tienen confianza plena en ninguno de los dos partidos", refiriéndose a PP y PSOE, "sí es cierto que un poco más hacia la izquierda". "Hasta ahora todo han sido buenas intenciones y sabemos que es muy difícil cumplir todo lo que se ha puesto encima de la mesa, aunque para nosotros son medidas razonables y creemos que hemos pedido lo lógico", manifestó.

"No nos tiembla el pulso a la hora de gobernar con cuatro partidos", dijo, al tiempo que defendió que en todo momento el partido apostó por un gobierno de concentración y de consenso. Por otro lado, ratificó que el pacto al que llegarán este sábado con el PSOE será por dos años. Será en ese momento en el que se revisará el grado de cumplimiento y se decidirá si se amplía o no.

Asimismo, en lo que se refiere a las negociaciones mantenidas el pasado martes con el secretario regional de Política Institucional de los socialistas, Francisco Conejo, y el delegado de la Junta de Andalucía, José Luis Ruiz Espejo, sobre la negociación de las condiciones del anticipo reintegrable que concedió la Administración regional a la Comisión Gestora, aseguró que estos se comprometieron a llevar a cabo sus solicitudes, que pasan por el aplazamiento de la deuda en 20 años y una moratoria de un año.

El pacto de gobierno alcanzado por los cuatro partidos contempla que la Junta de Gobierno Local estará compuesta por un total de seis miembros, tres de ellos del PSOE y uno para cada uno de los otros tres partidos restantes. Al mismo tiempo, el pacto prevé que el grupo socialista se quede la Alcaldía y la primera Tenencia de Alcaldía; OSP la segunda y, por último, Izquierda Unida, la tercera. Asimismo, y como ya se había adelantado anteriormente, la formación sampedreña asumirá la Tenencia de Alcaldía de San Pedro y la Concejalía de Hacienda. Cabe destacar también que, como ya anunció con anterioridad, el grupo liderado por José Carlos Núñez, Costa del Sol Sí Puede, no asumirá delegación alguna y por tanto no entrará dentro del reparto de las delegaciones municipales.

Piña destacó "el cambio de actitud del PP en las negociaciones y el esfuerzo que han realizado para llegar a un acuerdo", pero matizó que "el cambio llega ahora" y para ello será necesario llevar a cabo la modificación de numerosos reglamentos aprobados por los populares. Si bien una de las primeras medidas al llegar al Consistorio será la de realizar una auditoría externa de las arcas municipales.