Ocho años de cárcel para el pirómano que calcinó 270 hectáreas en Ojén

El Tribunal Supremo ha ratificado hoy la condena de ocho años de prisión para un hombre que fue declarado culpable por la Audiencia Provincial de Málaga por causar un incendio forestal que arrasó 270 hectáreas del paraje Sierra Parda del municipio malagueño de Ojén el 21 de julio de 2001.

De esta forma, el alto tribunal ha rechazado el recurso de casación presentado contra la sentencia dictada en septiembre de 2006 y pide el ingreso del condenado en un máximo de diez días al centro penitenciario de Alhaurín de la Torre, con el apercibimiento de que si no lo hace se decretará su busca y captura, ha informado hoy en un comunicado la Junta de Andalucía.

Según la sentencia, el procesado, J.M.G. de 42 años, fue considerado responsable del fuego que se mantuvo activo en el paraje durante cuatro días y "supuso un riego para la vida e integridad física" de los vecinos de la zona.

En la sentencia se determina que el hombre tenía disminuidas sus facultades volitivas e intelectivas, aunque no le eximen de la pena, y en cuanto a la responsabilidad civil, deberá pagar una multa de 460.000 euros.

Durante el juicio con jurado popular, el pirómano negó ser el causante del incendio y aseguró que a él le gustaba el monte y la naturaleza, por lo que nunca podría cometer un acto semejante.

El ya condenado está acusado también en otro procedimiento, pendiente de juzgar, de un incendio forestal el 5 de septiembre de 1999 en el paraje Fuentezuela, también de Ojén, que afectó a más de 260 hectáreas de alto valor ecológico.

En la sentencia de la Audiencia Provincial se expuso que el hombre tenía "el ánimo de provocar un incendio" que tuvo su origen en tres focos y causó pérdidas en productos forestales y bienes por valor de más de 561.172 euros, más 44.317 euros del coste para la extinción del fuego.

El Ministerio Público solicitó para el encausado once años de cárcel, mientras que la Empresa de Gestión Medio Ambiental (EGMASA), que se presentó como acusación particular, pidió diecisiete años.