Un conductor de un autobús escolar de Ronda que transportaba a doce niños da positivo en cocaína

Un conductor de un autobús escolar que transportaba a doce alumnos a un centro educativo de Ronda ha sido denunciado por la Guardia Civil por conducir sin la autorización necesaria y por dar positivo en un control que ha detectado rastros de cocaína en su organismo.

Los hechos ocurrieron el pasado 14 de marzo a las 8:30 horas cuando agentes del subsector de Tráfico pararon en la carretera A-374 a un autobús en el que viajaban doce escolares, según ha informado este lunes el instituto armado en un comunicado.

El conductor dio positivo por la presencia de cocaína en la prueba que le fue practicada en el lugar, que fue finalmente confirmada por el laboratorio que realizó el análisis.

También fue denunciado por carecer de autorización para realizar transporte escolar, por no presentar seguro obligatorio de viajeros y por no portar la señal V10 que indica que transporta escolares o menores.

Persecución a más de 120 km/h en Málaga: detenido un conductor drogado con orden de búsqueda

Agentes de la Policía Local de Málaga detuvieron el pasado miércoles a un hombre de 38 años como presunto autor de varios delitos, entre ellos conducción bajo los efectos de drogas, conducción temeraria, desobediencia, atentado y resistencia a la autoridad, así como daños. Además, pesaba sobre él una orden judicial de búsqueda y detención por un delito de malos tratos en el ámbito familiar.

Los hechos ocurrieron sobre la 01:30 horas, cuando una patrulla que circulaba por el parque empresarial El Viso detectó una furgoneta blanca de gran tamaño con el motor encendido y sin nadie en su interior, estacionada en la avenida de Los Vegas. Al acercarse, los agentes observaron a un hombre en actitud sospechosa. Al percatarse de la presencia policial, el individuo se introdujo rápidamente en el vehículo e inició la marcha, ignorando las señales de alto de los policías, que activaron luces y sirenas.

Lejos de detenerse, el conductor emprendió una huida a gran velocidad y llegó a embestir el lateral del coche patrulla, dañando la aleta delantera derecha. Durante la persecución, superó los 120 km/h en vías urbanas limitadas a 50, circuló en sentido contrario, ignoró señales de prioridad y se saltó varios semáforos en rojo. En al menos dos ocasiones estuvo a punto de colisionar con otros vehículos, y puso en peligro tanto a viandantes como a los propios agentes, a quienes incluso intentó atropellar cuando estos se bajaron del coche para interceptarlo.

Finalmente, ya de nuevo en la avenida de Los Vegas, el conductor perdió el control del vehículo al invadir el sentido contrario y acabó colisionando contra un coche estacionado. Pese al impacto, descendió de la furgoneta de forma agresiva y se abalanzó sobre uno de los agentes, al que intentó golpear. Tuvo que ser reducido con la ayuda de varios policías, oponiendo en todo momento una violenta resistencia.