La familia de Amy Fitzpatrick pide no olvidar que desapareció hace tres años

Familiares de la joven irlandesa Amy Fitzpatrick, de cuya desaparición en la localidad malagueña de Mijas se cumplirán tres años el 1 de enero, han anunciado hoy una campaña en la que recorrerán la Costa del Sol a lo largo de 2011 para evitar que se olvide el caso.

Según ha informado a Efe el abogado de la familia, Juan de la Fuente, la madre de la joven, Audrey Fitzpatrick, y su compañero sentimental, Dave McMahon, visitarán el día uno de cada mes -en lo que llamarán "Amy's day"- un municipio de la costa malagueña.

La campaña se iniciará el 1 de febrero en Mijas y en cada visita se producirá una reunión con los mandatarios del municipio y se pegarán carteles con la fotografía de la joven.

"La familia no quiere que Amy pase al olvido ni que la recuerden como una chica que se fue con su primo o con un amigo a su país porque no fue así", ha declarado De la Fuente, quien ha expresado la intención de la familia de reunirse con el primer ministro irlandés tras las elecciones que se celebrarán en el país en febrero de 2011.

En cuanto al balance de la búsqueda durante 2010, el abogado lo ha calificado de "negativo" y ha lamentado que pese a ofrecer una recompensa de un millón de euros a quien aportase una pista fiable, sólo han llamado "videntes o personas que querían reirse de la familia".

De la Fuente ha exceptuado unas cinco llamadas que han corroborado "datos que ya tenían en mente" desde el principio y que apuntan a dos personas de nacionalidad británica, una residente en España y otra en Inglaterra, conocidas por la joven y su familia.

Respecto a las causas de la desaparición, el abogado asegura que los familiares "tienen la sensación de que Amy no está entre nosotros" y descartan que se marchara por voluntad propia "sin documentación, sin teléfono móvil y sin dinero".

Asimismo, De la Fuente ha declarado que existen personas interesadas en "desviar la atención" y en que la investigación "no vaya a más" y ha recordado que alguien robó el teléfono móvil de Amy de la vivienda familiar y posteriormente documentación sobre el caso en el domicilio del abogado.

Fuentes cercanas a la investigación han asegurado hoy a Efe que no se han producido novedades en la búsqueda de la joven, que entonces tenía 15 años y pasó la Nochevieja de 2007 en casa de su amiga Ashley Rubio, en la urbanización Calypso de Mijas-Costa, donde ambas estuvieron cuidando del hermano pequeño de ésta última.

La mañana del 1 de enero de 2008 fueron a la vecina localidad de Fuengirola y tras almorzar visitaron el zoco de Calahonda y regresaron a la vivienda, según explicó en su día Ashley.

Según esta versión, que fue corroborada por la madre de Ashley, Amy Fitzpatrick se marchó sobre las 22.00 horas para dirigirse a su casa, ubicada en la urbanización Riviera del Sol.

En las fechas de su desaparición, Amy Fitzpatrick tenía el cabello moreno, ojos azules y 1,65 metros de estatura, estaba delgada y vestía un chándal cuando fue vista por última vez.